Desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania, los cementerios de los países aliados de Kiev, incluido Estados Unidos, crecen al ritmo de las muertes de mercenarios que lucharon del lado ucraniano. Un corresponsal de Sputnik visitó algunos de estos lugares con «soldados voluntarios», como los llama la prensa occidental, enterrados.
Entre ellos figura el veterano retirado de los Marines Grady Kurpasi, que murió dos meses después del inicio de la operación militar especial rusa. Este hombre de 50 años está enterrado en el Cementerio Nacional de Arlington, cerca de Washington, el más famoso de Estados Unidos, donde están sepultados políticos, astronautas e incluso presidentes, entre ellos John F. Kennedy.
En el otro extremo del continente, California, un cementerio se ha convertido en el lugar de descanso final de otro mercenario, Bryan Young, de 51 años, muerto por «fuego de artillería ruso» en la región de Donetsk en julio de 2023, según los medios estadounidenses.
Otro soldado mercenario enterrado en California es el veterano del Cuerpo de Marines Ian Tortorici. El joven de 32 años luchó para la Legión Internacional de Defensa Territorial de Ucrania y fue eliminado en un ataque de misiles de las FFAA rusas cerca de la ciudad de Kramatorsk.
El ciudadano estadounidense Dane Partridge, de 34 años, que había servido en Irak, combatió del lado ucraniano desde abril de 2022, pero luego resultó gravemente herido y murió unos días después. Partridge, que tenía esposa y cinco hijos, fue enterrado en Idaho.
También tenía 34 años el mercenario Paul Lee Kim, quien había servido en el Ejército de EEUU durante 12 años, abatido en Ucrania en 2022 y sepultado en un cementerio de Texas.
Desde el comienzo de la operación militar especial en Ucrania, Kiev recurre activamente al uso de mercenarios de otros países, utilizando sus misiones diplomáticas en el extranjero en ausencia de cualquier prohibición categórica.
En enero, el Ministerio de Defensa ruso informó de que casi 6.000 mercenarios extranjeros, que llegaron a Ucrania para luchar del lado del régimen de Kiev, perdieron la vida desde el inicio de los combates. De acuerdo con el ente castrense, al menos 1.113 mercenarios procedían de Estados Unidos, 491 de los cuales ya han sido abatidos.
La Defensa rusa subrayó también en un comunicado que Kiev utiliza a los mercenarios extranjeros como «carne de cañón» y que «ninguno del mando ucraniano les escatima la vida»
«Por lo tanto, solo tienen una opción: huir de Ucrania o morir. Las FFAA rusas seguirán destruyendo a los mercenarios extranjeros en el curso de la operación militar especial, independientemente de su ubicación en el territorio de Ucrania», concluye el comunicado.