Ottawa difundió la reciente revisión de su política de defensa, que supone, entre otros objetivos, reforzar las capacidades militares en el Ártico.
El Gobierno de Canadá hizo pública su política actualizada de defensa, que entre otros gastos supone renovar y expandir la flotilla de submarinos, al tiempo que el primer ministro, Justin Trudeau, admitió que el plan podría incluir submarinos nucleares.
El documento revelado por Ottawa el lunes indica que el país norteamericano quiere adoptar una postura más firme en el Ártico, con la construcción de nuevas instalaciones militares en el norte, así como el reforzamiento de sus capacidades marítimas y aéreas.
El plan contempla un programa de gasto masivo: Ottawa tiene previsto invertir en ese ámbito casi 6.000 millones de dólares en los próximos cinco años, y más de 53.800 millones en los próximos 20 años.
«Exploraremos opciones para renovar y ampliar nuestra flota de submarinos, a fin de que la Marina Real Canadiense pueda proyectar una disuasión persistente en las tres costas, con submarinos capaces de operar bajo el hielo y propulsados convencionalmente«, reza el documento.
No obstante, durante una rueda de prensa para presentar la nueva política de defensa, el primer ministro Trudeau sugirió que el país podría considerar la adquisición de submarinos nucleares.
«Ciertamente, eso es lo que estudiaremos: qué tipo de submarinos son apropiados para las responsabilidades de Canadá, de proteger la costa más larga del mundo y la mayor costa ártica», dijo al ser preguntado sobre la opción de adquirir naves no convencionales.
El primer ministro elogió la creciente cooperación con el bloque AUKUS, liderado por Estados Unidos, y celebró las perspectivas de que Japón se una a él. La asociación militar, establecida a finales de 2021 y apodada ‘OTAN asiática’, implica que EE.UU. y el Reino Unido ayuden a Australia en la adquisición de una flota de submarinos nucleares.