Según el Ministerio de Defensa ruso, se trata de una respuesta a «los intentos del régimen de Kiev de dañar las instalaciones de petróleo, gas y energía de Rusia».
Las Fuerzas Armadas de Rusia destruyeron un depósito de drones pesados ucranianos y un taller para su producción en la ciudad de Zaporozhie, empleando para ello el sistema de misiles táctico ruso Iskander, informó el lunes el Ministerio de Defensa del país euroasiático.
Desde el organismo señalaron que sus Fuerzas Armadas «están respondiendo a los intentos del régimen de Kiev de dañar las instalaciones de petróleo, gas y energía de Rusia, lanzando ataques con armas de precisión de largo alcance contra empresas del complejo militar-industrial, instalaciones de producción de armas y vehículos aéreos no tripulados e instalaciones energéticas que abastecen al complejo militar-industrial de Ucrania».
El anuncio del Ministerio de Defensa ruso tiene lugar en medio de los continuos ataques de las fuerzas ucranianas contra la central nuclear de Zaporozhie, que desde 2022 se encuentra bajo el control de Rusia.
Como consecuencia de los ataques de drones perpetrados el pasado domingo contra la central, tres trabajadores resultaron heridos, uno de ellos de gravedad. Desde Moscú condenaron los intentos de Kiev «de llevar a cabo provocaciones» contra la instalación. Además, denunciaron que Ucrania ha demostrado «con sus acciones criminales» que ha emprendido el «camino del terror nuclear».