Moscú, 6 abr. La portavoz de la cancillería rusa, María Zajárova, consideró hoy que el ataque de un dron contra una unidad militar de Transdniester es una provocación destinada a agravar la crisis en torno a ese territorio.
Según manifestó la diplomática, en el comentario publicado este sábado en el sitio web del Ministerio de Asuntos Exteriores de la nación eslava, “Rusia espera «una investigación exhaustiva de todas las circunstancias de lo sucedido».
«Esperamos que los que están detrás de esta acción imprudente sean plenamente conscientes de sus peligrosas consecuencias», advirtió la representante de la Cancillería rusa.
La víspera un dron kamikaze atacó una unidad militar ubicada en el distrito de Ribnita, en Transdniester, pero sin causar víctimas y daños materiales considerables, según informó el Ministerio de Seguridad Estatal de la autoproclamada república.
Semanas antes, el 17 de marzo, unos desconocidos utilizaron un dron kamikaze para hacer explotar un helicóptero Mi-8, lo que provocó un incendio en una unidad militar en Tiráspol, la capital de Transdniester.
El Ministerio de Exteriores de la autoproclamada república tachó de atentado terrorista el ataque contra la referida unidad militar.
Transdniester comunicó antes que instructores extranjeros están preparando en Moldavia unos grupos de combate, formados en particular por ucranianos, para cometer atentados y actos de sabotaje contra las instalaciones militares del enclave.
En mayo de 2022, Transdniester vivió una serie de atentados contra instalaciones de seguridad, militares y de comunicación, por lo que la república declaró entonces la alerta «roja» de amenaza terrorista, y la rebajó más tarde hasta la «amarilla».
La historia de esta república rebelde se remonta a 1992, cuando varios distritos de la ribera oriental del Dniéster, de población mayoritariamente rusohablante, se rebelaron contra Chisináu y proclamaron la creación de la República Moldava de Transdniester por miedo a que Moldavia se fusionara con la vecina Rumanía tras el colapso de la URSS.
Chisinau respondió con el envío de tropas al territorio rebelde, lo que provocó un conflicto armado que se prolongó por varios meses. Actualmente Transdniester es un área fuera del control del gobierno moldavo, con todos los atributos de un estado, incluida una moneda propia.