MOSCÚ — El informe de la ONU sobre torturas por parte de los militares de Ucrania no refleja la crueldad total de lo que está sucediendo, declaró a Sputnik el enviado especial de la Cancillería rusa sobre los crímenes de Kiev, Rodión Miróshnik.
«Esto no puede considerarse un estudio serio ni un reflejo absolutamente adecuado de la realidad. (…) No es una imagen completa de cómo Ucrania ignora el derecho internacional humanitario», declaró el diplomático.
En este contexto, recordó que la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), como varios otros organismos internacionales, es «bastante politizada» y por eso no puede incluir en sus informes la información completa.
Sin embargo, de acuerdo con el diplomático, «por razones políticas se vio obligada a tomar al menos una parte de los datos», que de hecho caracterizan con bastante claridad las acciones de Ucrania.
La Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre Ucrania publicó antes un informe en el que afirma que los soldados ucranianos cometieron crímenes de guerra al disparar y torturar a prisioneros de guerra rusos. La misión de la ONU informó de al menos 25 casos de este tipo.
Además, según el Alto Comisionado de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, Ucrania no abrió casos penales contra sus soldados que habían fusilado a prisioneros de guerra rusos, a pesar de que varias ejecuciones fueron documentadas.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial, cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el Este.