La ONU documenta abusos contra rusoparlantes y prisioneros rusos en Ucrania

Un reciente informe de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos documentó casos de tortura a prisioneros rusos en Ucrania, violaciones al derecho internacional en juicios a personas acusadas de ‘colaboración’ con Rusia, discriminación a hablantes de ruso y agresiones a la iglesia ortodoxa.

Se trata del trigésimo octavo informe de la Oficina del Alto Comisionado sobre la situación de los derechos humanos en Ucrania y abarca el periodo comprendido entre el 1 de diciembre de 2023 y el 29 de febrero de 2024. Se basa en el trabajo de la Misión de Observación de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ucrania (HRMMU).

Según el informe, la minoría de habla rusa en Ucrania es discriminada en comparación con otras minorías lingüísticas en el país.

La agencia sacó dicha conclusión después de estudiar una ley aprobada por el Parlamento ucraniano el pasado 8 de diciembre que introduce cambios en la legislación relacionada con los derechos de minorías nacionales.

«Si bien la ley supone un significativo paso adelante en la mejora de los derechos de las minorías nacionales, mantiene un trato diferenciado y discriminatorio entre, por un lado, las minorías nacionales que hablan una lengua oficial de la UE y, por otro lado, las minorías nacionales cuyas lenguas no son oficiales en la UE, como el ruso, el armenio o el romaní», dice el informe de la ACNUDH, publicado en su página web.

La agencia admitió que, de este modo, aunque dicha ley amplía los derechos de las minorías nacionales del primer grupo, las minorías del segundo grupo no pueden disfrutar de los mismos derechos.

La organización también llamó a Kiev a levantar la prohibición de reuniones pacíficas de las personas que se identifican como rusos étnicos.

Abusos contra prisioneros rusos
Para la elaboración del reporte, la misión de la ONU entrevistó, entre otras decenas de personas, a 44 prisioneros de guerra rusos, quienes dieron a los investigadores de la ONU «testimonios creíbles» de tortura o malos tratos en lugares de tránsito tras su desalojo en el campo de batalla.

Ocho prisioneros de guerra declararon haber permanecido retenidos en sótanos no identificados de edificios privados, probablemente situados en la región de Járkov, durante periodos de tiempo «muy prolongados», que oscilaron entre días y mes y medio, se indica en el reporte.

Otros 13 prisioneros de guerra declararon que, durante los interrogatorios, recibieron puñetazos y golpes con mazos de madera y palos; fueron sometidos a descargas eléctricas y simulacros de ejecución; y en dos casos, «amenazas de violencia sexual», indica el informe.

Intimidación a religiosos
De acuerdo con el reporte del Alto Comisionado, clérigos y feligreses de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana siguieron sufriendo intimidaciones durante el período que abarca el informe.

El ACNUDH registró seis casos en cinco regiones en los que grupos de personas irrumpieron por la fuerza en iglesias de la Iglesia Ortodoxa, justificando sus acciones con decisiones de las autoridades locales.

El reporte documenta un caso del 28 de diciembre de 2023, cuando un grupo de personas atacó el templo de Kazan, en la ciudad ucraniana de Ladizhin, en un incidente en el que al menos dos individuos implicados en este ataque afirmaron ser militares en activo de las Fuerzas Armadas ucranianas. Los agentes de policía presentes en el lugar no intervinieron.

También se documenta otro incidente, del 9 de enero de 2024, fecha en la que un grupo de unos 30 hombres vestidos con uniformes de camuflaje sin insignias utilizó dos vehículos pesados de construcción para romper las puertas y la valla del templo, y entraron por la fuerza en la iglesia ortodoxa. «Golpearon al clérigo y a dos feligreses, que sufrieron heridas leves. Al menos nueve personas fueron agredidas físicamente durante los dos incidentes», dice el informe.

La mayoría de las víctimas dijeron que no presentaron denuncias porque temían represalias, como amenazas de sus vecinos o el despido de su trabajo, afirma el Alto Comisionado.

Fuente