La organización criminal bloqueó vías, en medio de unos tensos acercamientos con el Gobierno para buscar un acuerdo.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó que no tolerará «chantajes» del Clan del Golfo, luego de que esa organización criminal decidiera bloquear algunas carreteras, justo cuando está negociándose el posible inicio del diálogo con el Gobierno.
La noche del pasado martes, el mandatario fue informado sobre la obstrucción de las rutas que conducen al municipio de Tierralta, a 78 kilómetros del lugar donde se encontraba junto a su gabinete.
Según los medios locales, Petro tenía previsto realizar un encuentro, la mañana del pasado martes, con los habitantes de Tierralta. La actividad fue cancelada y habría sido pospuesta para este miércoles.
Aunque no se explicaron las razones para el aplazamiento del evento presidencial, posteriormente se conoció que el grupo delictivo obstruyó las vías que conducían al lugar fijado por los organizadores para el encuentro, lo que impidió la movilización de las comunidades que esperaban asistir.
Una orden presidencial
«Orden del presidente: el Ejército llega de inmediato y me despeja las vías en Tierralta», enfatizó el mandatario durante una alocución transmitida por la señal pública.
«No entiendo cómo teniendo el Ejército aquí, el Clan del Golfo está tapando vías», se preguntó Petro, quien espetó a continuación. «¿Quién tiene el poder aquí? Si el pueblo tiene el poder, el Ejército obedece al pueblo. No vamos a admitir chantajes».
El presidente mostró su desacuerdo con la declaración emitida horas antes en nombre del Clan del Golfo, en la que afirmaban que estaban dispuesto a iniciar un proceso de conversaciones con el Ejecutivo.
«¡Qué bonitos!: El abogado dice que aceptan los diálogos de paz y por el otro lado están impidiendo que el pueblo hable. Así no es la paz, señores», agregó.
La invitación de Petro al diálogo con el grupo criminal está condicionada a que cesen los negocios ilícitos como la extorsión, el tráfico de migrantes, el narcotráfico y la explotación minera ilegal. El presidente aseveró que si no aceptan su propuesta, serán eliminados por la Fuerza Pública.