El último mandatario en presenciar el acto de la comunidad judía fue Fernando De la Rúa, en el año 2000.
El presidente de Argentina, Javier Milei, participó este lunes del acto por el aniversario número 32 del atentado contra la Embajada de Israel del 17 de marzo de 1992, acabando así con 24 años de ausencia de los sucesivos jefes de Estado en la conmemoración.
El último mandatario en asistir a la ceremonia que cada año realiza la comunidad judía en el lugar del ataque, en la Ciudad de Buenos Aires, fue Fernando de la Rúa, en 2000.
«Milei se convirtió en el primer jefe de Estado en más de dos décadas en asistir a este homenaje», destacó la Casa Rosada en un comunicado oficial.
El líder libertario concurrió a la ceremonia junto a la vicepresidenta Victoria Villarruel, luego de la tensión que hubo entre ambos por el rechazo del ‘megadecreto’ presidencial en el Senado a raíz de que Villarruel, titular de la Cámara Alta, habilitara el tratamiento sin contar con los votos del oficialismo para su aprobación.
La ceremonia tuvo lugar en el barrio porteño de Retiro con la presencia de familiares de víctimas y sobrevivientes del atentado, y en ella se leyó la lista de los nombres de las 22 víctimas del ataque, perpetrado mediante la explosión de un coche bomba.
En el acto no hubo pronunciamientos de los funcionarios de Gobierno. Los oradores fueron los embajadores de Israel, Eyal Sela, y de la Argentina en aquel país, Shimon Axel Wahnish.
Además de Milei y Villarruel, estuvieron los ministros Guillermo Francos (Interior), Luis Petri (Defensa), Sandra Petovello (Capital Humano) y Mariano Cúneo Libarona (Justicia), así como la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei (hermana del presidente), el vocero Manuel Adorni, el presidente del bloque de diputados oficialista, Oscar Zago, y el alcalde de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri.
Desde su llegada al poder, en diciembre de 2023, Javier Milei delineó la política internacional de su gestión, con EE.UU. e Israel como principales aliados. En su primera gira fuera de Argentina, en febrero pasado, el ultraderechista visitó Tel Aviv y anunció que mudará la embajada de su país a Jerusalén.
En ese viaje, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó al presidente argentino de «amigo» del país hebreo y le agradeció el anuncio.