Para la política, México erró al no solicitar compensaciones tras convertirse en un país de tránsito hacia territorio estadounidense.
Xóchitl Gálvez, candidata presidencial mexicana por la coalición opositora Fuerza y Corazón por México, aseguró este miércoles que no le teme ni al presidente de EE.UU., Joe Biden, ni al exmandatario Donald Trump y, por lo contrario, aspira entablar una relación «franca» con Washington.
«Hoy, México tiene que tener una negociación mucho más clara con EE.UU. A mí no me dan miedo ni [Donald] Trump ni [Joe] Biden. Se los digo sinceramente: al que me pongan, va a haber una relación franca, directa, clara», sostuvo la dirigente, en un acto proselitista celebrado en la ciudad fronteriza de Tijuana.
Del mismo modo, Gálvez adelantó que no tolerará de Washington «amenazas» de imposición de aranceles ni la imposición de «una agenda que violente derechos humanos», al tiempo que cuestionó que su nación se convirtiera en «el tercer país» que utilizan los migrantes para tramitar su ingreso a EE.UU. sin haber obtenido compensación alguna.
«El ser de facto tercer país sin haber pedido nada a cambio, fue un error garrafal del Gobierno actual. ¿Por qué? Porque de entrada debimos haber peleado que pusieran en regla los documentos de millones de mexicanos que están dentro de EE.UU.», valoró.