MOSCÚ — En caso de un conflicto entre Rusia y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Suecia podría servir como centro logístico para los aliados, escribe el diario ‘Financial Times’.
«Suecia, que no tiene una frontera directa con Rusia, podría jugar para los planificadores militares de la OTAN un papel diferente al de las naciones de primera línea. Funcionarios dicen que sería un centro logístico en caso de conflicto, así como una ruta de refuerzo para Finlandia o los países bálticos», señala el periódico.
Conforme con las previsiones, la bandera de Suecia se izará en la sede de la OTAN en Bruselas el 11 de marzo. A partir de esta fecha, el país nórdico será el miembro número 32 de la Alianza Atlántica.
Según el periódico, su incorporación brinda a los países bálticos «nuevas oportunidades de suministro por vía marítima», puesto que la isla sueca de Gotland está a menos de 200 kilómetros de la costa letona. Para el ministro de Exteriores letón, Krisjanis Karins, la adhesión de Suecia convierte el mar Báltico en «un lago de la OTAN».
En una reciente entrevista con el periodista estadounidense Tucker Carlson, el presidente ruso, Vladímir Putin, recalcó que para Rusia no tiene ningún sentido atacar a los Estados miembros de la OTAN.
Los políticos occidentales, denunció Putin, asustan con regularidad a sus habitantes con una inventada «amenaza rusa» para desviar la atención de los problemas internos, pero «la gente pensante sabe perfectamente que eso es un bulo».
A su vez, el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, declaró que la admisión de Suecia en el bloque militar tendría consecuencias negativas. Afirmó que Rusia adoptará medidas similares a las que se están desarrollando en el contexto de la adhesión de Finlandia, que ya se ha producido.