WASHINGTON — La exembajadora Nikki Haley confirmó la suspensión de su campaña por la candidatura republicana a las presidenciales de EEUU, con gratitud por el apoyo y sin arrepentimientos, tras la amplia victoria del expresidente Donald Trump en las primarias del llamado supermartes.
«El tiempo ha llegado ahora de suspender mi campaña. Dije que quería que la voz de los americanos fuera escuchada. Lo hice. No tengo arrepentimientos. A pesar de que ya no seré candidata, no dejaré de usar mi voz para las cosas en las que creo», dijo Haley en rueda de prensa.
En su mensaje, la exgobernadora de Carolina del Sur y exrepresentante de Washington ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) reivindicó la necesidad de un gobierno federal «más pequeño» tanto para la libertad como para la supervivencia económica de la nación.
«La ruta del socialismo es la ruta de la ruina para EEUU. Nuestro Congreso es disfuncional y solo empeora. Está lleno de seguidores y no de líderes (…) Apoyar a nuestros aliados en Ucrania, Israel y Taiwán es un imperativo moral, pero más: si retrocedemos, habrá más guerra, no menos», afirmó.
Trump superó a Haley en 14 de los 15 estados que el 5 de marzo realizaron simultáneamente las elecciones primarias (Alabama, Alaska, Arkansas, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, California, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah, Vermont, Virginia y Samoa).
Solo en Vermont se impuso Haley, y lo hizo con apenas 4,2 puntos porcentuales de ventaja sobre Trump, quien declaró desde su residencia en Mar-a-Lago que los resultados fueron «concluyentes».
Durante el Supermartes, el presidente Joe Biden también se impuso sobre sus rivales por la candidatura demócrata, Dean Philipps y Marianne Williamson.