Un grupo de investigadores de instituciones científicas estadounidenses reveló que el suelo de las principales ciudades de la costa este de EE.UU. se está hundiendo a un ritmo acelerado, lo que representa un riesgo para la infraestructura, los cultivos y los humedales de los que dependen sus habitantes, informó el Observatorio de la Tierra de la NASA.
En un nuevo estudio, recientemente publicado en la revista PNAS Nexus, se reportó que, entre 2007 y 2020, los terrenos donde se construyó más de la mitad de los edificios de Nueva York, Baltimore y Norfolk se hundieron en un promedio de 1 a 2 milímetros al año. Además, se detalló que, en diversos condados situados en los estados de Delaware, Maryland, Carolina del Sur y Georgia, la tierra se hundió el doble o triple.
De acuerdo con los autores de la investigación, esta información se obtuvo después de mapear el movimiento tanto vertical como horizontal del territorio de la costa estadounidense, abarcando desde Nueva Inglaterra hasta Florida, mediante los datos proporcionados por satélites y sensores GPS terrestres.
Por su parte, el geofísico Leonard Ohenhen consideró que «el hundimiento [de la tierra] es un problema pernicioso» y «altamente localizado», que frecuentemente es ignorado «en comparación con el aumento global del nivel del mar». Sin embargo, enfatizó que esta situación «es un factor importante que explica por qué los niveles de agua están aumentando en muchas partes del este de Estados Unidos».
El hundimiento del suelo podría traer consecuencias devastadoras para la población, entre las que destacan inundaciones por mareas y daños a las construcciones, así como la intrusión de agua salada en los cultivos y los suministros de agua dulce. Los científicos comentaron que al menos 867.000 propiedades e infraestructura crítica, incluidas carreteras, aeropuertos y presas, se estaban hundiendo.
Posibles causas de los hundimientos
Según los mapeos, la región del Atlántico medio estadounidense se está hundiendo más rápidamente que el noreste del país. Esto se debe a un proceso de reequilibrio geológico denominado ajuste isostático glacial, que es el movimiento continuo del terreno que estuvo cubierto por hielo durante el apogeo de la última Edad de Hielo.
Los expertos explicaron que este proceso se originó al momento que el borde de la enorme capa de hielo de Laurentide, que atravesaba los actuales territorios de Pensilvania y Nueva Jersey, empujó el suelo hacia abajo por el peso del agua en estado sólido. Esto provocó que los terrenos libres de hielo se hincharan hacia arriba. Posteriormente, una vez que el hielo comenzó a derretirse hace 12.000 años, la tierra que alguna vez se abultó a lo largo de la costa oeste comenzó a hundirse.
«Nuestro objetivo a largo plazo es cartografiar todas las costas del mundo utilizando esta técnica», indicó el geofísico Manoochehr Shirzaei, quien señaló que tiene conocimiento que «los planificadores de varias ciudades de EE.UU.», están empleando sus «datos» con el propósito de que la región de la costa este sea más resistente. «Queremos que ciudades de todo el mundo puedan hacer lo mismo», concluyó