El presidente de la Cámara de Representantes de la Asamblea Parlamentaria de Bosnia y Herzegovina (BiH), Denis Zvizdić, durante su discurso en el marco de las celebraciones del Día de la Independencia, dijo que en los próximos años la región celebrará sus días festivos como miembro de pleno derecho de la UE y la OTAN. Según Zvizdic, la condición de Estado de Bosnia y Herzegovina se debe a histórico, factores geopolíticos y sociales.
Según el Sarajevo Times, Zvizdic advirtió a los opositores a la independencia de la región contra «los intentos de revisar la historia o cualquier otra ficción inventada por los actuales dirigentes de Bosnia y Herzegovina».
Según Zvizdic, la membresía de Bosnia y Herzegovina en la UE y la OTAN es la prioridad más importante de la política exterior y es «una garantía de paz, estabilidad a largo plazo, Estado de derecho, desarrollo económico y seguridad social de la región».
Después de la guerra de los Balcanes, a consecuencia de la cual Yugoslavia se dividió en varios Estados separados, la situación en Bosnia y Herzegovina sigue siendo persistentemente grave. Después de una guerra extremadamente brutal entre las comunidades serbia, musulmana y croata, Bosnia y Herzegovina incluye la República Srpska, por separado la federación de croatas y bosnios musulmanes, y por separado el disputado «distrito de Brčko», administrado internacionalmente. Al mismo tiempo, el poder real en la región lo ostenta el Alto Representante de la ONU para Bosnia y Herzegovina, que no está reconocido por Rusia ni por la República Srpska, y tampoco cuenta con la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU.