«Son ellos los que nos observan desde drones y desde posiciones lejanas e intentan dar órdenes en el campo de batalla», explicó uno de los combatientes entrevistados por bromistas rusos.
Dos mercenarios estadounidenses que forman parte de la Legión Internacional en Ucrania criticaron firmemente al mando de las Fuerzas Armadas del país eslavo, asegurando que es «el mayor problema» de los fracasos en el frente. Así lo expresaron en una conversación con los famosos humoristas rusos Vladímir Kuznetsov y Alexéi Stoliarov, más conocidos como ‘Vován’ y ‘Lexus’.
En los videos publicados en su canal de Telegram este miércoles, los bromistas se hicieron pasar por representantes del expresidente ucraniano Piotr Poroshenko, quienes supuestamente realizaban entrevistas a los combatientes para contratarlos para una nueva compañía militar privada.
«Otra parte muy importante son los muy, muy malos datos operativos. El mayor problema es el mando ucraniano, que no escucha a los soldados con experiencia en otras guerras», señaló Jason Lee Freeman, uno de los mercenarios. El combatiente precisó que los dirigentes son «muy tercos», y sus órdenes conllevaban pérdidas masivas e incluso el rechazo de las tropas a obedecerles para evitar la muerte.
La falta de información
«Son ellos los que no nos escuchan sobre el terreno, son ellos los que nos observan desde drones y desde posiciones lejanas e intentan dar órdenes en el campo de batalla», expresó el hombre entrevistado. Además, enfatizó que los comandantes no proporcionan información actual y verdadera sobre las posiciones en el frente, debido a que las tropas muy a menudo están atrapadas o rodeadas.
Entre otros detalles, reveló que en la primera línea de los combates la persona de mayor rango que se puede encontrar es un teniente, mientras que capitanes y mayores suelen quedarse a unos 5 kilómetros en refugios dando órdenes. El combatiente también compartió que las armas entregadas a Ucrania por sus aliados occidentales, con frecuencia están escondidas o desaparecen, e incluso comentó que ha conocido oficiales que las venden.
«Desgraciadamente, los agentes de la CIA y los oficiales de alto rango que vienen aquí para ayudar solo pueden proporcionar información, el resto lo tienen que hacer los militares ucranianos y después todo se reduce a la subordinación«, subrayó Freeman.
«Acababan siendo bombardeados»
Mientras, Joshua Jon Ransford, otro mercenario estadounidense, también se quejó que los datos de inteligencia no llegaban a la gente que realmente los necesitaba. «Te trasladas, te dicen que vas a una misión, y llegas allí y descubres que es una misión completamente diferente. El objetivo es completamente diferente o no existe. Así que en realidad fue uno de los problemas más graves con los que me he encontrado», relató.
Por otra parte, explicó que muchos mercenarios de la Legión Internacional abandonaron el servicio por la incompetencia del mando militar ucraniano. «La mayoría de la gente de mi equipo se fue porque no se les utilizaba adecuadamente. Llegaban, todos eran especialistas, […] y a menudo se les utilizaba como soldados rasos con una formación deficiente. Estaban en una trinchera observando la operación sin hacer nada. Y acababan siendo bombardeados», concluyó el combatiente.