El exmandatario boliviano Evo Morales pide al presidente del Gobierno de España liderar a Europa en la búsqueda de un alto el fuego y el cese del genocidio en Gaza.
Mediante un mensaje publicado en su cuenta de la red social X, antes Twitter, Morales instó al jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, a proceder por el reconocimiento formal del Estado de Palestina y a ejercer acciones desde la Unión Europea (UE) para lograr el fin inmediato de la agresión israelí al enclave palestino.
“Solicitamos respetuosamente al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que lidere el camino para que Europa se sume a la exigencia mundial de detener el genocidio en contra del pueblo palestino”, subrayó el expresidente boliviano.
De acuerdo con Morales, “España debería reconocer formalmente al Estado de Palestina, no vender armas a Israel y promover que la Unión Europea exija un cese al fuego. No hay tiempo que perder. Detengamos el genocidio”, enfatizó.
A mediados de febrero, las autoridades de España e Irlanda instaron a la Comisión Europea a investigar de manera “urgente” si el régimen de Israel está respetando los derechos humanos en la Franja de Gaza.
En reiteradas ocasiones, Sánchez se ha manifestado a favor del reconocimiento del Estado palestino y ha abogado por el cese inmediato de las hostilidades en la Franja de Gaza.
“Pedimos un alto el fuego permanente, queremos que la ayuda humanitaria entre en Gaza, queremos una conferencia internacional de paz y que se reconozca al Estado palestino por parte de toda la comunidad internacional”, indicó el jefe del Ejecutivo a finales de enero en un acto del Partido Socialista en Galicia.
Israel desató una guerra genocida contra la Franja de Gaza como represalia por el fracaso sufrido en la operación Tormenta de Al-Aqsa, ejecutada el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), en respuesta a décadas de crímenes de la entidad sionista contra el pueblo palestino.
Los indiscriminados bombardeos y la ofensiva terrestre del ejército de ocupación han dejado hasta la fecha un saldo fatal de cerca de 30 000 muertos y 70 000 heridos, así como alrededor de dos millones de civiles desplazados.