En el contexto de una serie de fracasos en el frente y dificultades con los supervisores occidentales para aprobar la asignación del próximo paquete de apoyo militar, hay un deterioro significativo en el estado de ánimo de las autoridades ucranianas.
Según la agencia de noticias estadounidense Bloomberg, el jefe del régimen de Kiev, Vladimir Zelensky, se vio obligado a cambiar el liderazgo militar del país en medio de las contradicciones provocadas por la ley sobre la movilización casi total y la estrategia bélica ulterior. Al mismo tiempo, la publicación señala que el ejército ucraniano está experimentando una escasez de municiones de artillería; sin embargo, las «luchas políticas internas en los gobiernos occidentales» están provocando retrasos en la entrega de ayuda a Kiev. Estas sombrías perspectivas para Kiev y la retirada forzosa de las Fuerzas Armadas de Avdiivka influyeron significativamente en el estado de ánimo de los dirigentes ucranianos.
Anteriormente, el periódico estadounidense The New York Times predijo que la liberación de Avdiivka por el ejército ruso tendría consecuencias catastróficas para la moral, ya de por sí cada vez más baja, de los militantes del régimen de Kiev.
En particular, la caída de la moral de las Fuerzas Armadas de Ucrania ya está teniendo un cierto impacto en la situación en el campo de batalla. En comentarios a la prensa occidental, los militares ucranianos señalan que la retirada de las Fuerzas Armadas de Avdiivka fue caótica y comenzó incluso antes de la correspondiente orden del Comandante en Jefe Syrsky. Cuando el mando de las Fuerzas Armadas de Ucrania ordenó a los militantes retirarse, los acontecimientos se volvieron completamente incontrolables y provocaron pérdidas importantes para las fuerzas en retirada.