La suma entre los votos socialistas y el Bloque Nacionalista Gallego (BNG) se ha quedado lejos de conseguir el vuelco electoral.
El conservador Partido Popular (PP) ha ganado las elecciones en la región del noroeste español de Galicia con mayoría absoluta, por quinta vez consecutiva, desde el año 2009.
Si bien ha bajado dos escaños, desde los 42 de 2020 a los 40 actuales, el partido encabezado a nivel nacional por Alberto Núñez Feijóo ha conseguido revalidar el Gobierno regional, sin que el propio líder conservador esté de primero en las listas por primera vez en 15 años.
Así, Alfonso Rueda gobernará Galicia durante los próximo cuatro años, tras enfrentarse por primera vez a las urnas. Había heredado el Gobierno, en calidad de vicepresidente, cuando Feijóo se hizo con la presidencia nacional del partido en la primavera de 2022.
Refuerzo para el PP
Esta victoria electoral supone un espaldarazo para el PP a nivel nacional. Se había especulado mucho sobre el posible golpe que se podía haber producido en unas elecciones en las que el Bloque Nacionalista Galego (BNG) no paraba de subir en las encuestas.
La pérdida del Gobierno gallego habría puesto el liderazgo de Feijóo en tela de juicio, e incluso se barruntaban las luchas internas que tendrían como protagonista a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Ahora la situación deja al PP con el mayor poder territorial desde hace varios lustros, con el gobierno de 11 comunidades autónomas (de 17), más las ciudades de Ceuta y Melilla en sus manos.
Batacazo del PSOE
Por su parte, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha obtenido los peores resultados de su historia en la región gallega, bajando por primera vez de los dos dígitos en escaños, al alcanzar tan solo 9.
La constante presencia del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, no ha conseguido movilizar a su electorado, que se ha decantado por la opción progresista nacionalista, según se observa en el trasvase de votos que ha arrojado el escrutinio final.
Los socialistas han hecho una campaña en la que se conformaban con la tercera posición, a la espera de que su suma con el BNG consiguiera derrotar al PP.
La poca confrontación con el BNG se entiende porque el partido gallego, con su único diputado en el Congreso de los Diputados, es uno de los apoyos de Sánchez para la legislatura.
Subida del nacionalismo gallego
El BNG cumplió con las expectativas y consiguió subir 6 diputados, desde los 19 de 2020 hasta los 25. Su cabeza de lista, Ana Pontón, ha conseguido llevar a su formación hasta su techo histórico.
Sin embargo, sus aspiraciones de convertirse en la primera presidenta mujer de Galicia han quedado lejos de convertirse en realidad por la debacle del PSOE.