MOSCÚ — Moscú está preocupado por la tensión en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán e insta a estos países a mostrar contención y dar pasos hacia la desescalada, declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.
«Estamos preocupados seriamente. Pedimos con insistencia a Bakú y Ereván mostrar mesura, dar pasos hacia la desescalada y evitar emprender cualquier acción que lleve al empeoramiento de la situación. Los problemas que surgen deben solucionarse solo con medios políticos y diplomáticos», declaró durante una sesión informativa para los medios.
De acuerdo con la diplomática, lo sucedido viene a mostrar la necesidad de que Armenia y Azerbaiyán retomen lo más rápido posible la implementación de los acuerdos tripartitos alcanzados a nivel cumbre.
Las disputas territoriales deben solucionarse en el marco de la comisión bilateral de delimitación de la frontera armenio-azerí, declaró Zajárova, agregando que Moscú está preparado para hacer su aporte a ese proceso.
El Ministerio de Defensa de Azerbaiyán comunicó el 13 de febrero que los guardias fronterizos azeríes llevaron a cabo una operación de represalia, liquidando un puesto de guardia armenio. Según el Ministerio de Defensa de Armenia, murieron cuatro militares.
El 12 de febrero, el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán acusó a las tropas armenias de haber disparado hacia el territorio azerbaiyano, hiriendo a un efectivo. Durante los últimos meses en la frontera armenio-azerí no se registraba ninguna infracción del régimen de alto el fuego, ambas partes estaban trabajando en el proyecto final de tratado de paz.
Armenia y Azerbaiyán libraron dos guerras por Nagorno Karabaj desde que ese territorio, de población mayoritariamente armenia, decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
El pasado 7 de diciembre, Bakú y Ereván afirmaron en una declaración conjunta que existe una oportunidad histórica para lograr la paz largamente esperada en la región del Cáucaso sur, confirmaron la intención de normalizar las relaciones y alcanzar un tratado de paz sobre la base del respeto a los principios de soberanía e integridad territorial.