El aumento salarial de las Fuerzas Armadas el año pasado, que costó alrededor de 800 millones de libras esterlinas, podría explicar la medida.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido congeló nuevos gastos de capital durante dos meses mientras lucha con el impacto del aumento de los precios en su presupuesto, informó el lunes The Telegraph citando a sus fuentes.
El cese de gastos, que comenzó a principios de febrero y durará hasta finales de marzo, pone en entredicho proyectos planificados. Así, por ejemplo, la decisión podría reducir la participación del Reino Unido en el evento Project Convergence 2024, una reunión de naciones aliadas para probar innovaciones militares, que se desarrollará en primavera en EE.UU.
Además, el medio señala que los proyectos de investigación sobre inteligencia artificial y tecnología cibernética que debían aprobarse en las próximas semanas se enfrentan ahora a «un futuro incierto».
Expertos en defensa sugieren que el aumento salarial de las Fuerzas Armadas el año pasado, que costó alrededor de 800 millones de libras esterlinas (unos 1.000 millones de dólares) y que salió del presupuesto de capital, podría explicar la medida actual.
«Es un caos absoluto»
De acuerdo con el reporte, la decisión de congelar el gasto de capital ha causado alarma en algunas divisiones del departamento. «Se está produciendo una lucha tremenda. Es un caos absoluto», indicó una fuente del organismo a The Telegraph.
Por su parte, el exministro de Defensa del país, Ben Wallace, comentó la situación. «Todas las luces de advertencia están parpadeando en rojo en todo el mundo a medida que aumentan las perspectivas de conflicto. Ahora no es el momento para que el Tesoro o el Gobierno estén bailando en torno a este deber de liderazgo tan vital. La defensa necesita un aumento sostenible del gasto a largo plazo», afirmó.
Comentario del Ministerio de Defensa
Sin embargo, el Ministerio de Defensa rechazó las afirmaciones. «Como lo hemos hecho anteriormente, continuamos revisando la actividad relacionada con el capital durante el resto del año financiero», explicó un portavoz del organismo.
En este contexto, detalló que la institución está gastando más de 50.000 millones de libras esterlinas (más 63.000 millones de dólares) al año «apoyando despliegues globales y continuando invirtiendo en nuevos tanques, aviones de combate y buques de guerra».