Sergei Shoigu, jefe de defensa de Rusia, declaró recientemente que las tropas de la nación continúan su avance en múltiples regiones, lo que resultó en la pérdida de más de 23.000 soldados ucranianos el mes pasado.
Ucrania actúa de la manera que Rusia lo permite, dijo al medio de noticias Glos 24 un ex comando polaco que usa el nombre clave de Naval.
«En el fútbol se suele decir que alguien juega como el adversario le permite. Y lo mismo ocurre con el conflicto [de Ucrania]», señala el ex comando convertido en analista militar.
También argumentó que Kiev no podría recuperar los territorios que había perdido porque Rusia es “demasiado poderosa para ser expulsada”.
«Los ucranianos, por supuesto, cuentan con nuestro fuerte apoyo [occidental], pero son más pequeños. Tienen mucha menos fuerza y recursos. Rusia simplemente tiene un potencial mucho mayor en todos los aspectos», enfatizó el analista.
El ex soldado de las fuerzas especiales polacas añadió que está seguro de que Ucrania “tendrá que sentarse a la mesa de negociaciones en algún momento”.
«Si alguien piensa que nunca lo aceptará, se equivoca, porque en este momento Ucrania está contra la pared», concluyó.
Las declaraciones se producen después de que el Ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu , dijera que las bajas del ejército ucraniano en enero ascendieron a más de 23.000 militares. Añadió que el régimen de Zelensky está arrojando las reservas restantes de Ucrania al campo de batalla e implementando apresuradamente movilizaciones forzadas para evitar el colapso de las líneas defensivas de las fuerzas ucranianas.
Mientras tanto, las tropas rusas avanzan y amplían sus zonas de control. Durante sus ofensivas en las zonas de Kupyansk, Krasny Liman y Donetsk, liberaron las comunidades de Veseloye, Krakhmalnoye y Tabayevka, según Shoigu.
Anteriormente, el jefe de defensa destacó que el ejército ruso había logrado con éxito el objetivo principal para 2023, que era frustrar la contraofensiva de verano del régimen de Kiev. Shoigu afirmó además que, durante la contraofensiva que duró más de seis meses, las fuerzas ucranianas sufrieron pérdidas significativas, que incluyeron más de 125.000 efectivos y 16.000 unidades de armamento.