LA HAYA — La Corte Internacional de Justicia de la ONU (CIJ) ordenó a Israel que tome todas las medidas necesarias para impedir el genocidio en la Franja de Gaza, una decisión que establece obligaciones legales para el Estado judío, declaró la presidenta de la corte de La Haya, Joan Donoghue.
«Israel debe (…) tomar todas las medidas con respecto a los residentes de la Franja de Gaza para impedir la realización de todos los actos de conformidad con el artículo 2 de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio», anunció Donoghue la decisión provisional.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Sudáfrica calificó la decisión de la CIJ sobre la demanda contra Israel de una «victoria decisiva para el Estado de derecho internacional».
«En el día de hoy se marca una victoria decisiva para el Estado de derecho internacional y un hito significativo en la búsqueda de justicia para el pueblo palestino», indicó la Cancillería sudafricana en un comunicado.
Palestina también saluda el fallo de la CIJ, informó el ministro de Asuntos Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Riyad Maliki.
«Acogemos con satisfacción las medidas provisionales prescritas por la justicia internacional, (…) Las decisiones de la justicia internacional se adoptaron en interés de la humanidad y del derecho internacional», declaró Maliki, citado por el ministerio en la red social X.
El pasado 7 de octubre, el movimiento Hamás atacó Israel desde la Franja de Gaza, causando unos 1.200 muertos y cerca de 5.500 heridos y capturando a unos 250 rehenes.
En represalia, Israel declaró la guerra a Hamás e inició ataques masivos contra las instalaciones civiles y otras en Gaza, al tiempo que imponía un bloqueo total al enclave palestino, cortando el suministro de agua, alimentos, medicinas, electricidad y combustible. El 27 de octubre, Israel lanzó una incursión terrestre a gran escala en la Franja de Gaza.
Los ataques israelíes han dejado hasta la fecha más de 26.000 muertos y casi 64.500 heridos en el enclave palestino.
Del 24 de noviembre al 1 de diciembre, durante una tregua humanitaria pactada con la mediación conjunta de Catar, Egipto y Estados Unidos, se canjearon 80 rehenes israelíes de Hamás, en su mayoría mujeres y niños, por 240 presos palestinos sin delitos de sangre. Además, las milicias palestinas liberaron a casi 30 cautivos más, en su mayoría tailandeses residentes en Israel. Unos 130 rehenes todavía permanecen cautivos en Gaza.
Al expirar la tregua, las operaciones bélicas se reanudaron y el flujo de ayuda humanitaria que llega al sur del enclave palestino desde Egipto se redujo nuevamente a una quinta parte de lo que Gaza recibía antes de esa guerra, según la ONU.
Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a pactar un alto al fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.