La canciller ecuatoriana, Gabriela Sommerfeld, informó que su país puede «vender», «regalar» o «intercambiar» el equipamiento militar comprado a Rusia que actualmente no sea operativo tras las advertencias de Moscú a Quito de no transferir armamento y material bélico ruso a otros países.
«Este equipamiento no estaba operativo y, si no está operativo, el Ecuador lo puede dar de baja, lo puede vender, lo puede regalar o lo puede intercambiar», afirmó la ministra en rueda de prensa días después de una reunión de alto nivel entre Washington y el Gobierno de Daniel Noboa
«Y hay otros insumos que, estando ya en el país, van a ser anunciados incluso en el día de hoy», agregó Sommerfeld.
Según la funcionaria, su país tiene un acuerdo con el Gobierno estadounidense para entregarle equipamiento «que no está operativo y recibir equipamiento que está siendo mapeado y determinado por el Ministerio de Defensa para que venga y nos ayude en el control de la seguridad interna, particularmente, en el Ecuador». Para la ministra, esta decisión de Ecuador «no viola ninguna normativa» y «no es ilegal».
Sin embargo, el Gobierno de Rusia advirtió recientemente a Ecuador de abstenerse de transferir el material ruso a Estados Unidos por considerar que sería una violación del derecho internacional, al tiempo que dañaría las relaciones bilaterales.
El pasado 10 de enero, el presidente Noboa anunció que su país intercambiaría con Washington «la chatarra ucraniana y rusa por 200 millones de dólares en equipamiento moderno» a finales de este mes, pero no especificó de qué tipo de material se trataba.
Las declaraciones de Sommerfeld tienen lugar días después de que Estados Unidos anunciara que aumentará la presencia de su personal del FBI en el país sudamericano, además de que entregará «equipos de seguridad» a Ecuador, en el marco de la crisis de violencia que enfrenta la nación latinoamericana a causa del crimen organizado.
Entre el material que transferirá Washington a Quito hay «más de 20.000 chalecos antibalas y más de un millón de dólares en equipos de seguridad y respuesta a emergencias, incluidas ambulancias y vehículos de apoyo logístico de defensa», según un comunicado de la Casa Blanca.
«En los próximos días, el FBI aumentará su personal en el país para apoyar a la Policía Nacional y la Fiscalía General del Ecuador», añadió la Casa Blanca.