PEKÍN — Washington debe seguir el principio de ‘una sola China’ e inmediatamente poner fin a las provocaciones en el estrecho de Taiwán, declaró el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin.
«Estados Unidos debe cumplir en realidad el principio de ‘una sola China’ y los tres comunicados conjuntos chino-estadounidenses, cesar inmediatamente las acciones provocativas y las violaciones de derechos, dejar de crear problemas para la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán y de enviar cualquier señal errónea a las fuerzas separatistas en Taiwán», dijo Wang.
La víspera, militares chinos acompañaron al destructor estadounidense USS John Finn durante su navegación sobre el estrecho de Taiwán.
Las relaciones oficiales entre el Gobierno central de China y su provincia insular de Taiwán se rompieron en 1949, después de que las fuerzas del partido nacionalista Kuomintang sufrieran una derrota en la guerra civil contra el Partido Comunista y se trasladaran a ese archipiélago. Las relaciones se restablecieron solo a nivel empresarial e informal a finales de la década de 1980.
La política fundamental de China respecto a Taiwán es la reunificación pacífica bajo el principio de «un país, dos sistemas».
La UE el cumplimiento de las normas de libre comercio.
China confía en que la Unión Europea acate las normas básicas de competencia honesta y libre comercio, dijo Wenbin, al comentar las nuevas medidas de fortalecimiento de la seguridad económica de la UE, propuestas por la Comisión Europea.
«Esperamos que la UE observe las normas básicas de la economía de mercado, tales como libre comercio, competencia honesta y cooperación en aras del desarrollo», indicó.
La Comisión Europea (CE) presentó el miércoles un nuevo paquete de medidas sobre el fortalecimiento de la seguridad económica de la UE, que estipulan recrudecer el control tanto sobre las inversiones extranjeras en la UE, sobre todo en tecnologías clave, como sobre las inversiones europeas en las tecnologías militares y de inteligencia, potencialmente peligrosas, de terceros países, así como el control sobre las tecnologías y productos de doble uso de la UE destinados para la exportación.
En marzo de 2023, la jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al pronunciar un discurso sobre las relaciones entre la UE y China, declaró que la Comisión Europea propondrá limitar las inversiones europeas en el desarrollo de las tecnologías en terceros países, que en un futuro podrían presentar amenaza para la seguridad de los miembros de la UE y contribuir al desarrollo del potencial militar de tales Estados.