La noche del 16 de enero, las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron un ataque de precisión contra un punto de despliegue temporal de combatientes extranjeros en la ciudad de Járkov.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, ha expresado este viernes la esperanza de que el pueblo francés entienda el «alcance real» de la implicación de París en el conflicto ucraniano.
La noche del 16 de enero, las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron un ataque de precisión contra un punto de despliegue temporal de combatientes extranjeros en la ciudad de Járkov, la mayoría de los cuales eran franceses. Desde el Ministerio de Defensa ruso detallaron que más de 60 mercenarios murieron y más de 20 fueron trasladados a centros médicos.
En este contexto, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia convocó el jueves al embajador de Francia en Moscú.
«Confiamos en que la opinión pública francesa reciba por fin información veraz sobre el alcance real de la implicación de Francia en el conflicto y tome conciencia de la responsabilidad por la muerte y el sufrimiento de un número cada vez mayor de personas, que tiene que compartir con sus autoridades», destacó Zajárova.
Además, la vocera rusa subrayó que se informó al embajador francés que «las muertes de sus compatriotas son responsabilidad de París«, que aprueba «el funcionamiento de mecanismos de reclutamiento» de mercenarios en el país.
«La conducción por parte de Occidente, incluida Francia, de una ‘guerra subsidiaria’ y el aumento constante del suministro de armas y material militar al régimen de [Vladímir] Zelenski van en contra de las declaraciones sobre la importancia de establecer la paz, provocan una escalada de las hostilidades, causan numerosas víctimas civiles y se convierten en cómplices de los crímenes de guerra del régimen de Kiev», indicó.