Vitali Klichkó expresó su decepción por la decisión del Bundestag de rechazar la entrega de misiles Taurus de largo alcance a Ucrania.
El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, se quejó el jueves de la escasez de municiones en Ucrania, mientras que las Fuerzas Armadas ucranianas están sometidas a una «presión demencial por parte de Rusia».
«Desde hace meses hay una enorme escasez de munición», declaró el funcionario en una entrevista al periódico alemán Bild. También expresó su decepción por la decisión del Bundestag, que el 17 de enero rechazó la entrega de misiles Taurus de largo alcance a Ucrania.
Según el alcalde, estos misiles son importantes para Kiev porque «pueden perturbar la logística de las tropas rusas». «Por eso me gustaría aprovechar esta oportunidad para enviar una señal a Alemania: estamos defendiendo nuestro país, pero también estamos defendiendo a toda la Unión Europea. Nunca hay que subestimar a Rusia», señaló.
Vitali Klichkó reconoció en octubre del año pasado sus «complicadas» relaciones con el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski. Además, el político apoyó el mes pasado la posición del comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Valeri Zaluzhny, quien criticó el fracaso de la contraofensiva y describió la situación en el frente de Ucrania como «un punto muerto».
Mientras, la asistencia militar y financiera que Ucrania recibía de manera regular de sus aliados occidentales ha disminuido drásticamente desde el fracaso de su contraofensiva. Un paquete de más de 60.000 millones de dólares de financiación sigue paralizado en EE.UU. debido a divisiones políticas, y otro de más de 50.000 millones de euros (55.000 millones de dólares) está aún sin aprobar en la Unión Europea.