A principios de octubre, Olaf Scholz decidió no apresurarse a entregar esas armas a Kiev por temor a que pudieran ser utilizadas contra el territorio ruso, dado su alcance de 500 kilómetros.
Con 485 votos en contra, 178 a favor y 3 abstenciones, el Bundestag rechazó por amplia mayoría este miércoles una moción para suministrar a Ucrania misiles de crucero aire-tierra Taurus. Los únicos que apoyaron la propuesta —además de un parlamentario de AfD y otro no inscrito en ninguna bancada— fueron los legisladores del bloque conservador de la CDU/CSU, que dio 176 votos a favor, del total de los 197 escaños que tiene.
Los misiles Taurus, que el Gobierno ucraniano lleva mucho tiempo exigiendo, tienen un alcance de 500 kilómetros. Son unos de los misiles más modernos, capaces de destruir búnkeres subterráneos fortificados, puentes, depósitos de armas y otros objetivos, así como de hundir buques de guerra e inutilizar aeropuertos o puertos navales.
Los temores a que los Taurus puedan ser utilizados por Ucrania contra el territorio de Rusia fueron la principal razón por la que el Gobierno alemán no se apresuró a aprobar su suministro. El canciller Olaf Scholz afirmó a principios de octubre del año pasado que Alemania no estaba dispuesta a entregar ese tipo de armas a Kiev, dijo al resaltar la importancia de evitar una mayor escalada del enfrentamiento bélico que pudiera hacer que Berlín se convirtiera en parte del conflicto.
La moción de CDU/CSU pedía explícitamente al Gobierno alemán que «proporcione a Ucrania de forma definitiva e inmediata el mayor número posible de misiles de crucero Taurus operativos».
Este martes, el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció en rueda de prensa en París el suministro adicional de 40 misiles de crucero de largo alcance SCALP-EG, que son similares a los Taurus alemanes y que llegarán a Ucrania en las próximas semanas.