En noviembre de 2023, por primera vez desde mayo del mismo año, Rusia se convirtió en el principal exportador de uranio a Estados Unidos, calculó Sputnik basándose en datos públicos.
De acuerdo con el servicio estadístico estadounidense, en noviembre de 2023, EEUU compró combustible de uranio a cuatro países —Rusia, el Reino Unido, Japón y Bélgica— por un total de casi 191 millones de dólares. Al mismo tiempo, Moscú se convirtió en el principal exportador, al proporcionar uranio por un valor de 96 millones de dólares.
En términos del costo total, los suministros de combustible nuclear ruso aumentaron casi por la mitad en noviembre en comparación con octubre de 2023. Anteriormente, durante varios meses, Moscú ocupaba entre el segundo y cuarto lugar en el suministro de uranio a EEUU. Así, en octubre, Washington importó uranio ruso por valor de 63 millones de dólares y en septiembre por 32 millones de dólares.
En total, en los 11 primeros meses de 2023, Rusia vendió uranio a Estados Unidos por un valor de 1.017 millones de dólares, el más alto desde 2010. En 2022, Moscú exportó a EEUU combustible nuclear por valor de 766 millones de dólares.
Previamente, se conoció que el Congreso de EEUU aprobó una iniciativa para prohibir la importación de uranio enriquecido producido en Rusia, que permanecerá en vigor hasta 2040.
«EEUU depende peligrosamente del suministro ruso de combustibles nucleares para nuestra actual flota de centrales nucleares», afirmó a principios de 2023 la presidenta del Comité de Energía de la Cámara de Representantes, Cathy McMorris Rodgers, en una declaración sobre el proyecto de ley que ella misma presentó.
Pero tal medida podría afectar gravemente a sus planes de construir sus propios reactores avanzados, señalaron expertos estadounidenses.
Los productores de uranio enriquecido no están dispuestos a invertir en la organización del enriquecimiento con niveles de enriquecimiento más altos (HALEU) hasta que no se les garanticen pedidos suficientes, enfatizaron.
Desde la compañía rusa Rosatom subrayaron que siempre cumplieron sus obligaciones contractuales de exportar uranio dentro de los plazos acordados, y que seguirán haciéndolo en adelante. La industria nuclear debe estar protegida de las turbulencias geopolíticas, puntualizaron.