Kenneth Eugene Smith, condenado por cometer un asesinato por encargo en 1988, sobrevivió a un intento de ejecución mediante inyección letal, que fracasó porque los funcionarios carcelarios no lograron encontrar dos vías intravenosas en su cuerpo.
El estado de Alabama podrá realizar la primera ejecución en EE.UU. de un recluso mediante gas nitrógeno, dictaminó este miércoles el juez federal R. Austin Huffaker, según informa AP. El nuevo método para la aplicación de la pena capital será comprobado el 25 de enero con el reo Kenneth Eugene Smith, condenado por haber asesinado por encargo a una mujer en 1988.
El juez rechazó el pedido del recluso de suspender la ejecución, en la que, según su defensa, el Estado busca convertirlo en un «sujeto de prueba». El abogado Robert Grass adelantó que apelarán la decisión del magistrado.
Un intento de ejecución fallido
Smith fue uno de los dos hombres condenados por el asesinato por encargo de Elizabeth Sennett, esposa de un predicador, en el condado de Colbert, hecho ocurrido en 1988. Su marido estaba profundamente endeudado y quería cobrar el seguro por la muerte de su esposa, por lo que contrató a los dos sicarios y les pagó 1.000 dólares a cada uno. El otro hombre condenado por el asesinato fue ejecutado en 2010.
En noviembre de 2022, las autoridades locales ya habían procurado ejecutar a Smith mediante inyección letal, pero el intento fracasó debido a que los funcionarios de la prisión no lograron encontrar dos vías intravenosas en el cuerpo del recluso.
Un año después, la Corte Suprema del estado de Alabama autorizó la ejecución de Smith con el uso de nitrógeno. De concretarse la medida, ese sería el primer lugar del mundo en llevar a cabo tal tipo de ejecución.
Defensores y opositores del método
Los defensores del nuevo método de ejecución, que priva de oxígeno al recluso obligándolo a respirar solo nitrógeno hasta provocar su muerte por asfixia, han teorizado que sería indoloro. Sin embargo, sus oponentes lo han comparado con una experimentación humana.
En enero, cuatro expertos de la ONU instaron a las autoridades estadounidenses a detener la ejecución de Smith mediante asfixia con nitrógeno puro, debido a que ese método, nunca probado, puede someterlo a «tratos crueles, inhumanos o degradantes, o incluso tortura». Los relatores especiales manifestaron preocupaciones por la «muerte dolorosa y humillante» que puede provocar el nuevo método. Los castigos que «causan dolor o sufrimiento severo» violan la Convención contra la Tortura, de la que EE.UU. es parte, argumentaron los expertos.
Aunque Oklahoma y Misisipi también cuentan con autorización para esa forma de ejecución, ninguno de los dos estados ha intentado utilizarla hasta ahora.