Un grupo de activistas propalestinos roció este jueves con pintura roja el coche oficial del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, en señal de protesta, según videos difundidos en redes sociales. La pintura imitaba la sangre de los palestinos muertos en el conflicto entre Israel y Hamás, mientras los manifestantes gritaban: «¡Qué vergüenza!».
