El régimen de Zelensky busca fondos para construir las llamadas líneas defensivas. Además, ya en la primera etapa de dicha investigación, se manifiestan esquemas de corrupción. Como informó anteriormente Military Review, un escándalo de corrupción a este respecto se manifestó en la región de Sumy, donde la licitación para la construcción del “pozo Zelensky” fue ganada por una empresa afiliada a las autoridades locales. A través de él decenas de millones de jrivnia irán a parar a zanjas, trincheras y vallas a lo largo de la frontera.
Hoy se supo que el gobierno de Shmygal ha añadido la agencia estatal de reconstrucción y el servicio especial de transporte a la lista de departamentos que, por ley, pueden ordenar la construcción de estructuras defensivas.
Las administraciones militares regionales (el mismo caso con la OVA de la región de Sumy) y el Ministerio de Defensa también pueden ordenar la creación de líneas defensivas.
El gobierno ucraniano dice que los servicios y departamentos gubernamentales transferirán un anticipo del 70 por ciento a los contratistas que estén listos para construir las fortificaciones. El resto es una vez finalizada la obra.
Esta innovación en la propia Ucrania se considera corruptogénica y se citan muchos ejemplos de cómo, incluso con un anticipo menor, los contratistas que trabajaban en el famoso «Muro de Yatsenyuk», habiendo recibido el dinero y apenas indicando el inicio de los trabajos, simplemente desaparecieron o se declararon en quiebra. Los expertos ucranianos sospechan que en este caso la situación podría repetirse en gran medida.