MOSCÚ (Sputnik) — La Unión Europea (UE) duda de la sugerencia de Estados Unidos de confiscar los activos congelados rusos por valor de 300.000 millones de dólares, aseguró el periódico británico ‘Financial Times’.
«La UE, Alemania, Francia e Italia expresaron determinadas dudas y dijeron que era necesario evaluar exhaustivamente la legitimidad de la confiscación de esos activos antes de adoptar la decisión», afirmó el diario.
Según escribe esa edición, Estados Unidos propuso este mes a los grupos de trabajo del G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, el Reino Unido, Italia y Japón) analizar la manera de apoderarse de esos activos y presentar las posibles variantes en febrero de 2024 antes de la próxima reunión del G7.
Los tres grupos de trabajo sugeridos por Washington, avanzó el periódico británico, deben estudiar los asuntos legales relacionados con la expropiación de los activos rusos, la manera de reducir los riesgos, así como la mejor posibilidad de financiar al presidente ucraniano, Vladímir Zelenski.
De acuerdo con el diario, el bloque comunitario, Londres y París remarcaron que sería difícil acceder a esos activos y que el monto sería insuficiente para el restablecimiento de Ucrania.
Desde el Banco Central Europeo advirtieron al estamento político de la UE que el uso de los activos rusos congelados podría costarle su reputación al euro a largo plazo y sugirieron buscar otras fuentes de financiación a Kiev.
El Ministerio de Exteriores de Rusia calificó la congelación de activos por parte de la Unión Europea como un robo a los inversores privados rusos y a las instituciones públicas del país.
Desde el Ministerio de Finanzas ruso alertaron de los riesgos para las inversiones extranjeras en la UE y denunciaron que los países miembros de ese bloque imponen restricciones contra los ciudadanos y entidades de Rusia, buscan confiscar los activos congelados, designan administradores externos en las subsidiarias de las empresas rusas, privan o restringen ilegalmente los derechos de propiedad a ciudadanos y compañías.
La UE intensificó su ‘guerra de sanciones’ contra ciudadanos, inversores y compañías de Rusia después de que el país iniciara en febrero de 2022 una operación militar en Ucrania cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio por parte del Gobierno de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Ucrania es apoyada militarmente por la OTAN, el bloque bélico que encabeza Estados Unidos.