«Estamos siendo testigos de una atroz falta de distinción en la operación militar de Israel», denunció el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, condenó los ataques de Israel contra civiles en Gaza. Lo manifestó este lunes en una publicación en X (anteriormente Twitter), al declarar necesaria y urgente una «pausa humanitaria» en ese conflicto.
«Ciertamente, estamos siendo testigos de una atroz falta de distinción en la operación militar de Israel en Gaza», expuso Borrell. «Durante las operaciones militares más recientes han muerto devotos, tres rehenes israelíes y cientos de otros civiles. Esto debe parar. Se necesita urgentemente una pausa humanitaria», afirmó.
«Demasiados civiles han sido asesinados en Gaza, como lo han señalado entre otros los ministros de Asuntos Exteriores de Francia, Alemania y el Reino Unido», sostuvo el diplomático. Borrel hizo referencia al artículo conjunto del ministro de Exteriores británico, David Cameron, y su homóloga alemana, Annalena Baerbock, así como a los comentarios de la canciller francesa, Catherine Colonna. Todos ellos instaron a establecer una tregua durable en la Franja de Gaza para cesar las muertes de civiles.
Previamente, el sábado pasado, en un ataque de las fuerzas israelíes contra la parroquia latina de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza, dos mujeres perdieron la vida y varias personas resultaron heridas, informó el Patriarcado Latino de Jerusalén. El incidente generó la condena de funcionarios y líderes religiosos internacionales, incluidos el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Antonio Tajani, y el papa Francisco.
Del mismo modo, el viernes, el Ejército del país hebreo mató a tres rehenes israelíes en el sector de Shejaiya, en la ciudad de Gaza, que estaban desarmados, vestidos de civil y ondeaban una bandera blanca.
No es el primer llamado a un alto al fuego por parte de Borrell, que en noviembre ya declaró en una entrevista que si Israel quiere «construir la paz», no puede «sembrar más odio».