La legislación establece que la revisión se lleve a cabo al final del mandato de cada presidente, pero un magistrado tomó esta decisión tras un pedido de la oposición.
El Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), órgano con funciones de control vinculado al Parlamento de Brasil, realizará una auditoria de los obsequios que el presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, recibió en 2023.
La legislación actual estable que la auditoria se lleve a cabo al final del mandato de cada presidente que, en el caso de Lula, sería en 2027.
«No tiene sentido auditar los obsequios de quienes están en el cargo, porque solo se puede saber si el presidente restará o no alguna cosa recibida cuando finalice su mandato», explicó un magistrado del TCU al diario O Globo.
Irregularidades con Bolsonaro
Sin embargo, el juez Augusto Nardes tomó la decisión en respuesta a una petición de la bolsonarista Bia Kicis, presidenta de la Comisión de Inspección y Control Financiero de la Cámara.
La oposición presentó esta solicitud cuando el TCU investigaba posibles irregularidades en los regalos que recibió el exmandatario Jair Bolsonaro durante su mandato (2019-2022), en viajes oficiales.
Uno de los casos más sonados fueron las joyas que le regaló la monarquía de Arabia Saudita a Bolsonaro, y que no fueron declaradas al ser introducidas al país suramericano.
Este mismo mes, los técnicos del TCU recomendaron que, en un plazo de 15 días, Bolsonaro entregue la colección de regalos oficiales recibidos durante su gestión presidencial y que no fueron incorporados a los activos de la Unión.