Addis Abeba, 16 dic. El fortalecimiento de asociaciones y el anuncio de nuevos compromisos por parte de la delegación de Etiopía que participó en el segundo Foro Mundial sobre Refugiados marcó la semana que hoy concluye aquí.
El viceprimer ministro y titular de Asuntos Exteriores etíope, Demeke Mekonnen, encabezó la representación local en el cónclave realizado en la ciudad suiza de Ginebra y que Francia copatrocinó con Colombia, Japón, Jordania y Uganda para promover las causas de esas personas y reflexionar sobre el progreso desde el primer foro en 2019.
Con vista a esa cita mundialista, el Servicio de Refugiados y Retornados del país (RRS) africano convocó en octubre pasado un taller de validación ministerial de alto nivel durante el cual fueron respaldados seis compromisos relacionados con los impactos adversos del cambio climático y transformar determinados campos de refugiados en asentamientos urbanos.
Abordan la integración de los refugiados en los sistemas nacionales existentes; crear entornos propicios para una mayor inversión en las regiones de acogida, proporcionar acceso a la tierra y a sistemas de riego y mejorar la conectividad digital para impulsar la capacidad del gobierno con el objetivo de facilitar los registros y documentación civil.
En aquel momento, Mekonnen recordó que Etiopía alberga a un millón de refugiados y solicitantes de asilo y, como uno de los países de acogida más grandes del mundo, destacó el compromiso de recibir a esas personas como una obligación internacional.
Como parte de las actividades desarrolladas en Ginebra al margen del foro, el gobierno etíope y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) acordaron el jueves pasado realizar esfuerzos concertados para abordar las cuestiones migratorias.
El acuerdo fue resultado de una reunión entre Mekonnen y la directora general de la OIM, Amy Pope. Durante la discusión, el representante de Addis Abeba subrayó la necesidad de vincular la migración con el desarrollo para abordar los desafíos de la migración ilegal, citado por la Cancillería local.
reafirmó el compromiso inquebrantable del país africano de colaborar con las partes interesadas para transformar las vidas de los refugiados y las comunidades de acogida.
Pope, por su parte, dio la bienvenida al jefe de la diplomacia etíope y reiteró la voluntad de la OIM de seguir profundizando la cooperación para abordar intereses comunes. Acordó también consolidar asociaciones para aprovechar la migración en el desarrollo sostenible.
Con anterioridad, ese mismo día el viceprimer ministro africano intervino en un evento organizado conjuntamente por su país y la Fundación IKEA de Holanda, bajo la facilitación del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), para lanzar el Pacto Melkadida para los Refugiados y la Hoja de Ruta de Kebribeyah.
Expresó su profundo agradecimiento a la Fundación IKEA por su valiosa asociación en la coorganización del Pacto para los Refugiados de Melkadida y la Hoja de Ruta de Integración de Kebribeyah, ejemplos del enfoque multifacético de Etiopía para el desarrollo sostenible inclusivo en la región de Somali.
Proteger e integrar a los refugiados requiere una asociación de múltiples partes interesadas, incluido el sector privado, señaló, al tiempo que recordó que Addis Abeba dio un paso significativo para integrar a esas personas en las políticas y servicios básicos nacionales.
Con costos de cinco años para el desarrollo local inclusivo, la iniciativa liderada por el gobierno y de propiedad comunitaria es aplicada en los distritos de acogida de refugiados de Bokolmayo y Dollo Ado.
La directora general del RRS, Teyiba Hassan, se refirió a la historia de la acogida de refugiados y expresó su gratitud a IKEA por su apoyo.
Por otra parte, la víspera Mekonnen dialogó con el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, sobre formas de promover la cooperación con ese organismo internacional.
Durante la reunión el jefe de la diplomacia etíope elogió a Grandi por el éxito del encuentro y pidió a los socios internacionales apoyar a Addis Abeba, un país que acoge a más de un millón de refugiados.
Grandi celebró la declaración de esos seis nuevos compromisos y reafirmó la disposición de apoyar su implementación.