En el encuentro, líderes y lideresas de distintos puntos de la geografía colombiana expusieron la situación de los derechos humanos y los efectos de la política de paz del Ejecutivo en sus territorios.
Este jueves se celebró en Bogotá, Colombia, la cuarta Cumbre Humanitaria Nacional, en la que unos 700 colectivos, representantes de 15 territorios del país, debatieron sobre los avances de la política de ‘paz total’ implementada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
De su parte, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en Colombia informó que los líderes y lideresas expusieron «la situación de los derechos humanos (…) en el marco de los diversos diálogos de paz«, según se lee en un comunicado publicado en su cuenta de X.
Pero si bien el organismo saludó «los avances en el cese al fuego«, también advirtió sobre «la persistencia de las afectaciones a la sociedad civil, reflejadas en homicidios contra personas defensoras, masacres, reclutamiento forzado de niños y niñas, y desplazamiento de liderazgos históricos en los territorios».
Por su parte, la organización Vivamos Humanos, que vela por el respeto a los derechos fundamentales, destacó que trabajan para lograr que las acciones violentas se reduzcan a cero. Hacen énfasis en que van por buen camino, ya que en el segundo semestre de este año los hechos criminales se redujeron en 34 %. Sin embargo, las Fuerzas Armadas colombianas reportan al menos 71 presuntas violaciones del cese al fuego por parte de grupos disidentes de las FARC y el ELN.
Sin reducción de las masacres
En relación con la cantidad de personas que son asesinadas en Colombia en el contexto de masacres, Petro admitió hace pocas semanas que pese a los esfuerzos de territorialización de la paz y los diálogos emprendidos con distintos grupos armados, su Administración no ha logrado hacer disminuir el flagelo, que exhibe valores semejantes a los reportados en 2022.
Desde su punto de vista, esto es una consecuencia directa del abandono por parte de su antecesor en la Presidencia, Iván Duque, del Acuerdo de Paz suscrito en 2016 entre el Gobierno del entonces mandatario Juan Manuel Santos y las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
«En este momento nos mantenemos en el mismo estado que lo dejó el Gobierno de Duque«, admitió el mandatario ante la prensa desde Dubái, donde se encontraba participando de la COP28.
Pese a ello, argumentó que la política de pacificación que se adelanta en su gestión permitirá reducir estas y otras violencias. «Creo que retomar la paz, como estamos haciendo, vuelve a poner las cifras de personas, no simplemente números, vuelve a poner una tendencia descendente», dijo al respecto.