El mandatario, que se despedirá del cargo este domingo, sostuvo que todos los países miembros del bloque quieren hacerlo «más fuerte».
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, aseguró este jueves que si bien el tratado de libre comercio entre el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión Europea (UE) es «imprescindible» desde el punto de vista geopolítico, ha de servir «a todos», recoge una nota de prensa de la Casa Rosada.
El pacto comercial «es un acuerdo, geopolíticamente hablando, imprescindible para no quedar atrapados en la bipolaridad de China y Estados Unidos. Pero que sea imprescindible exige que nos sirva a todos, que sea un pacto donde todos ganemos, porque si va a ganar uno y el resto va a perder, ese no es un buen pacto», dijo el mandatario desde Río de Janeiro, donde se celebró la 63ª Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Estados Asociados.
En compañía de sus pares de Brasil, Luiz Inácio da Silva; Uruguay, Luis Lacalle Pou; Paraguay, Santiago Peña; y Bolivia, Luis Arce Catacora, Fernández recalcó que todos los miembros de la alianza comparten «la misma voluntad de hacer fuerte al Mercosur», en un contexto global donde ya no median los conflictos ideológicos, sino donde «se avecina (…) una enorme guerra comercial» entre Washington y Pekín.
«No es imposible»
De su parte, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este jueves que «no es imposible» concretar el acuerdo comercial del bloque suramericano con la UE, pese a las diferencias que existen entre las partes.
«No hay nada que nos sea imposible de conseguir, incluso este intento de llegar a un acuerdo con la UE, que lleva 23 años, pero tenemos que seguir intentando llegar a un acuerdo con la UE«, declaró Lula en su discurso inaugural ante sus colegas de Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay.
Aunque el pacto comercial con Bruselas figuraba como uno de los temas centrales del encuentro de alto nivel, las expectativas de conseguir una fórmula que satisficiera a los dos bloques se rebajaron durante las últimas jornadas, especialmente tras la disconformidad que expresara públicamente el presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien valoró que no favorece a ninguno.
Del lado suramericano, el presidente paraguayo, Santiago Peña, descartó de plano la firma inmediata del tratado, al considerar que la UE debe flexibilizar las condiciones de negociación porque, tal y como están, socavan la soberanía de los miembros del Mercosur.