El movimiento palestino tuvo que cancelar y posponer el ataque porque había sido detectado por el Ejército israelí.
Hamás inicialmente había planeado atacar el territorio israelí en abril, durante la víspera de la fiesta judía del Pésaj, informó el pasado sábado Channel 12 citando a soldados anónimos de la unidad de inteligencia de señales 8200 de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Según el medio, la organización palestina tuvo que cancelar la acción porque el Ejército israelí detectó los primeros indicios de los preparativos y elevó el nivel de alerta. Los altos mandos de Hamás decidieron posponer el ataque, pero la fecha del nuevo intento se mantuvo en secreto por temor a que hubiera agentes israelíes infiltrados entre los combatientes del movimiento, reportaron las fuentes.
Por su parte, los militares israelíes consideraron que las advertencias de los servicios de inteligencia eran una falsa alarma. También se informa de que el Ejército israelí disponía de información de inteligencia sobre un ataque próximo y advirtió de ello a los altos cargos, pero sus advertencias fueron calificadas de «fantasías». «Se lo dijeron en tiempo real, había muchas cosas que deberían haber encendido las luces de alarma», destacaron las fuentes en la unidad 8200, que culparon a los comandantes de arrogancia.
Al mismo tiempo, según reporta Financial Times citando a personas familiarizadas con el asunto, los servicios de inteligencia de Israel recibieron un informe detallado que advertía sobre un ataque inminente de Hamás poco antes de que el movimiento palestino llevara a cabo su ofensiva el pasado 7 de octubre. No obstante, un oficial de inteligencia de alto rango respondió al informe afirmando que se trataba de «un escenario imaginario«.