Según fuentes, congresistas creen que si las negociaciones se alargan hasta el Año Nuevo, las posibilidades de un paquete suplementario para esos países en el último momento se reducirán drásticamente.
Los líderes del Congreso de EE.UU. esperan reunir un paquete suplementario para ayudar a Ucrania e Israel, así como llevar a cabo mejoras en el sistema de inmigración del país norteamericano, antes de finales de este año, informó el domingo NBC, citando personas familiarizadas con el asunto.
Concretamente, cuatro fuentes directamente relacionadas con las negociaciones dijeron al canal de televisión que el período entre el Día de Acción de Gracias, el 23 de noviembre, y la Navidad, 25 de diciembre, es crucial.
Asimismo, señalan que tanto los miembros del Partido Republicano como los del Partido Demócrata creen que, si el calendario se alarga hasta el Año Nuevo, las posibilidades de conseguir los cuatro puntos del plan —la ayuda a Israel, Ucrania y el Indo-Pacífico, y la seguridad fronteriza— en el último momento se reducirán de manera drástica.
«Lo más probable es que Israel se apruebe por sí solo y Ucrania se apruebe junto con los avances en la frontera», comentó un legislador republicano que apoya los contornos de la solicitud de ayuda de la Administración.
¿Sin ayuda a Ucrania?
Otras fuentes del Senado indican que, si las conversaciones se prolongan hasta el nuevo año, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, podría intentar incluir solo la ayuda al país israelí en cualquier proyecto de ley de financiación que el Congreso estadounidense adopte para cumplir el primero de los dos plazos de gasto acordados, lo que, añaden, haría mucho más improbable la aprobación de la ayuda a Kiev.
El Congreso de EE.UU. aprobó la semana pasada un plan de gasto a corto plazo para evitar un cierre federal, pero aplazó hasta mediados de enero las discusiones más amplias y difíciles sobre el presupuesto a largo plazo.
NBC explica que, si las negociaciones sobre la ayuda suplementaria se estancan en dichas conversaciones presupuestarias, el proceso podría complicarse mucho, detallando que, si a esto se le añade la cercanía a las elecciones presidenciales de 2024, las posibilidades de que se alcance un gran acuerdo podrían ser escasas.