El Ministerio de Defensa de Rusia dice que las fuerzas ucranianas han sufrido pérdidas significativas en la batalla en la orilla oriental del río Dnipro en la región de Kherson.
El Ministerio de Defensa emitió la declaración horas después de que Ucrania afirmara que sus fuerzas habían logrado expulsar a los soldados rusos de sus posiciones en la región y habían establecido varias cabezas de puente.
«El enemigo se encuentra en la orilla derecha (occidental) del Dnipró y durante sus intentos de desembarcar en las islas perdió más de 460 militares, entre muertos y heridos, dos tanques y 17 vehículos», dijo el Ministerio de Defensa ruso.
Un funcionario ruso en la región también dijo que las fuerzas rusas estaban «destruyendo» a las fuerzas ucranianas «a mayor escala» en la aldea de Krynky, donde, según dijo, habían quedado atrapadas.
Horas antes, el portavoz del Estado Mayor ucraniano, Andriy Kovalyov, afirmó que «unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania lograron expulsar a los rusos de sus posiciones en la margen izquierda del Dniéper y consolidarse allí».
Dijo que las tropas ucranianas estaban llevando a cabo acciones de sabotaje y reconocimiento para descubrir e interrumpir la logística de los suministros de municiones y alimentos rusos.
También admitió que el ejército ruso opuso una fuerte resistencia y trajo refuerzos.
Las tropas ucranianas llevan meses luchando por cruzar el río Dniéper y transportar equipo y suministros militares pesados, con el fin de abrir una nueva línea de ataque en el sur, en la ruta terrestre más directa a Crimea, que declaró su independencia de Ucrania en 2014.
El comandante en jefe de las fuerzas ucranianas, Valery Zaluzhny, reconoció en una entrevista con The Economist a principios de este mes que la guerra con Rusia había llegado a un «punto muerto».
«Al igual que en la Primera Guerra Mundial, hemos alcanzado un nivel de tecnología que nos sitúa en un punto muerto».
Hizo el reconocimiento meses después de que Ucrania lanzara operaciones de contraofensiva contra las fuerzas rusas en el sureste y el este. Las operaciones, sin embargo, se han estancado y los avances en los dos ejes principales del frente sur son modestos desde que comenzaron a principios de junio.