«Lo que marca la diferencia entre una sociedad civilizada y un grupo terrorista es el respeto a la vida humana», subrayó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, hizo un llamamiento a Israel para que evite ser «consumido por la ira» y proporcione el acceso a la ayuda humanitaria para los inocentes que viven en la Franja de Gaza.
«Un horror no justifica otro», declaró Borrell este jueves durante una rueda de prensa conjunta con el ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen. «Civiles inocentes, entre ellos miles de niños, han muerto en las últimas semanas. También sabemos que la gente se ve obligada a abandonar sus casas y necesita ayuda. Necesitan alimentos, agua, combustible y protección», añadió.
Además, el jefe de la diplomacia de la UE expresó que Israel tiene el derecho de defenderse, sin embargo, recalcó que atender a las personas necesitadas es «otra cosa», subrayando que exactamente «lo que marca la diferencia entre una sociedad civilizada y un grupo terrorista es el respeto a la vida humana».
A su vez, Cohen señaló que la situación humanitaria alarmante en el enclave palestino se debe a Hamás, no a su país. «Solo hay un responsable de esta atrocidad, de la masacre del 7 de octubre, del mundo que comenzó después y también del sufrimiento de la población de Gaza: es Hamás, que está patrocinado por Irán«, afirmó.
La misma jornada, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU advirtió que la Franja de Gaza se enfrenta a una enorme escasez de alimentos y a una hambruna masiva, y casi toda la población necesita «desesperadamente» ayuda alimentaria. De los 1.129 camiones que han entrado en Gaza desde que se abrió el paso fronterizo de Rafa, el 21 de octubre, solo 447 transportaban alimentos suficientes para satisfacer únicamente el 7% de las necesidades calóricas mínimas diarias de la población, detalló el PMA.