De acuerdo con el representante del organismo, Siria alcanzó el mismo porcentaje de los edificios destrozados en 4 años de combates.
El 50 % de las viviendas en la Franja de Gaza fueron destruidas solo en un mes, desde la última escalada del conflicto palestino-israelí, declaró en una rueda de prensa este jueves Abdallah Al Dardari, subsecretario general y director de la Oficina Regional para los Estados Árabes en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En su discurso, dedicado a un informe del organismo, publicado en la misma jornada, sobre el impacto social y económico en el enclave palestino, el funcionario indicó que tal situación provocará un desplazamiento «eterno» en la zona, acompañado por las consecuencias humanitarias, económicas, de desarrollo y seguridad.
«Se tardaron 4 años de combates en Siria para perder ese porcentaje de viviendas que Gaza perdió en un mes. No tiene precedentes», comparó las estadísticas, señalando que la restauración de la zona será un desafío para la comunidad mundial. En este contexto, Al Dardari se refirió a la escalada de mayo de 2021, al subrayar que de los 1.700 hogares destrozados en los 11 días de intensificación del enfrentamiento en aquel entonces, solo se han reconstruido 200.
De acuerdo con los pronósticos de la oficina, se espera el aumento del nivel de la pobreza entre 20 % y 45 %, relativamente la duración de la guerra entre Israel y Hamás. Asimismo, se prevé la posibilidad del declive del PIB hasta el 12 % este año y hasta 9 % el siguiente, en comparación con los índices preguerras.
«La recuperación económica de Gaza tras un alto el fuego no será inmediata, teniendo en cuenta la destrucción a gran escala y el acceso incierto a los recursos, incluidos los materiales y equipos, debido al asedio a Gaza», reza el informe de Naciones Unidas.
Anteriormente, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés) advirtió que el número de desplazados crece constantemente, mientras que los refugios están superpoblados y no pueden acoger a más personas.