Las instalaciones de almacenamiento del bloque se acercan a su plena capacidad antes del invierno.
Los comercializadores de gas de la UE están utilizando las instalaciones de almacenamiento ucranianas para guardar el exceso de combustible a pesar del conflicto militar en el país, informa Financial Times.
Según Gas Infrastructure Europe, los depósitos de gas europeos ya están llenos al 99%, lo que ha obligado a las empresas energéticas del bloque a colocar el exceso de reservas en Ucrania antes de los picos de demanda de los meses de invierno. La UE logró superar en agosto su objetivo de llenar el 90% de los depósitos hasta noviembre.
No obstante, los países del bloque siguen comprando combustible, incluido gas natural licuado, para evitar una posible nueva fuerte subida de los precios europeos del gas, que cayeron un 10% el martes ante las previsiones de un tiempo más cálido en las próximas semanas.
Por ello, las empresas recurren cada vez más a Ucrania, donde se encuentran los mayores depósitos de Europa, para almacenar sus reservas. Según los informes, la cantidad de gas almacenado en Ucrania ha alcanzado su nivel más alto desde febrero de 2022, cuando Moscú lanzó su operación militar, y ahora consiste en más de 2.000 millones de metros cúbicos de gas pertenecientes a entidades de la UE.
El país también ha ofrecido tarifas de almacenamiento baratas y una exención de derechos de aduana durante tres años, lo que facilita la reimportación de gas a la UE.
No obstante, los analistas advierten de que las medidas adoptadas no garantizan que Europa disponga de todos los recursos energéticos que necesita para el próximo invierno.
Wayne Bryan, director de investigación sobre el gas en Europa de LSEG, afirmó que la capacidad de almacenamiento existente proporciona suministro a corto plazo, pero advirtió de que el frío o las interrupciones en Noruega, proveedor clave de gas a Europa, «agotarían rápidamente estas instalaciones de almacenamiento».
Por su parte, Natasha Fielding, responsable de precios del gas en Europa de Argus, agencia especializada en informes de precios, afirmó que «Europa ha hecho todas las reservas posibles». «El riesgo de escasez de gas en Europa este invierno es bajo, a menos que se produzcan importantes interrupciones imprevistas del suministro u olas de frío prolongadas y profundas que afecten a Europa y Asia al mismo tiempo», afirmó.