La apertura también permitirá que los palestinos heridos reciban tratamiento en Egipto.
Egipto abrió este miércoles el cruce de Rafa, en la frontera con la asediada Franja de Gaza, para evacuar a los extranjeros y permitir que los heridos reciban tratamiento en su territorio. Se trata de la primera vez que se abre desde el inicio de la escalada del conflicto entre Israel y el grupo palestino Hamás el 7 de octubre.
Se espera que unos 400 extranjeros y personas con doble nacionalidad, así como unos 90 enfermos y heridos, sean admitidos en Egipto, reportó AFP. Hasta el momento, convoyes de ayuda que se necesitan desesperadamente han pasado al enclave palestino, pero a ninguna persona se le había permitido cruzar.
En imágenes compartidas en las redes sociales se puede ver como decenas de personas y automóviles, así como ambulancias, se congregaron en el lugar para cruzar hacia Egipto.
La iniciativa fue alcanzada luego de un acuerdo entre Egipto, Israel y Hamás, en coordinación con Estados Unidos y la mediación de Catar, según una fuente con conocimiento de la cuestión citada por Reuters. Hasta el momento no se informó hasta cuándo permanecerá abierto el cruce.
No obstante, expertos citados por Al-Jazeera advirtieron que la medida no es suficiente para contener el desastre humanitario en Gaza. Tamer Qarmout, profesor de políticas públicas en el Instituto de Estudios de Posgrado de Doha, Catar, culpó a Israel por el escaso número de personas a las que se permitió escapar. «Las fronteras están bajo su control, basándose en el hecho de que Israel sigue siendo la potencia ocupante en la Franja de Gaza», explicó.
Asimismo, advirtió que «los egipcios están nerviosos ante el escenario de desplazamiento» de los palestinos en su territorio. «No quieren ver refugiados en el Sinaí. También quieren proteger la causa palestina; no quieren dar ningún pretexto para que Israel vacíe Gaza de sus propios ciudadanos y los traslade a Egipto», aseveró.
El Ejército de Israel sitió Gaza tras el inicio de la escalada militar. La ONU y organizaciones de ayuda han denunciado que los civiles del enclave viven en una catástrofe de salud pública, y los hospitales luchan por tratar a las víctimas a medida que se agota el suministro de electricidad.
A pesar del repudio internacional a las masacres contra los palestinos en la Franja de Gaza, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) siguen atacando objetivos civiles en el enclave, argumentando que estos bombardeos tienen como objetivo eliminar a los mandos de Hamás y a las «células terroristas».
Este martes, las FDI efectuaron un bombardeo en el campo de refugiados palestino de Jabalia, en el norte de la Franja de Gaza, que provocó el derrumbe de varios edificios y, según diversas estimaciones, se cobró la vida de entre 50 y 100 personas, y dejó varios centenares de heridos.
Desde el Ejército israelí afirmaron que la muerte de civiles en el campo de Jabalia es una «tragedia de guerra» que está justificada porque «Hamás se esconde detrás de los civiles».