El comisionado general del Organismo de Obras Públicas y Socorro de la ONU para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente ha denunciado que «los habitantes de Gaza sienten que no se les trata como a otros civiles» y «la mayoría de ellos se sienten atrapados en una guerra con la que no tienen nada que ver».
El comisionado general del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (UNRWA, por sus siglas en inglés), Philippe Lazzarini, al intervenir en una sesión del Consejo de Seguridad del organismo este 30 de octubre, ha declarado que el ataque de Hamás contra Israel no exime al Estado hebreo de sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario.
«Toda guerra tiene reglas, y esta no es una excepción», ha afirmado al subrayar que los habitantes de Gaza merecen empatía, mientras que los pocos camiones a los que se les permite pasar por el cruce de Rafa no son «nada» comparado con las necesidades sin precedentes de dos millones de habitantes de Gaza, la mitad de los cuales son niños.
«Hoy en día, los habitantes de Gaza sienten que no se les trata como a otros civiles. La mayoría de ellos se sienten atrapados en una guerra con la que no tienen nada que ver. Sienten que el mundo los está equiparando a todos con Hamás», ha afirmado Lazzarini al subrayar que «esto es peligroso«. «Se está deshumanizando a toda una población», ha denunciado.
«La muerte de niños palestinos no puede ser un daño colateral»
Lazzarini ha tachado de «impactantes» los incesantes bombardeos de las Fuerzas de Defensa de Israel contra la Franja de Gaza y ha sostenido que «el nivel de destrucción no tiene precedentes«. «La tragedia humana» que se desarrolla en la Franja de Gaza «es insoportable», ha señalado el jefe de la UNRWA, al tachar de «desplazamiento forzado» el hecho de que en tres semanas un millón de personas fueran empujadas por Israel del norte al sur, aunque esta zona también sufre ataques mortíferos israelíes. «Ningún lugar es seguro en Gaza«, ha reiterado.
Casi el 70 % de los muertos son niños y mujeres, dijo, citando a Save the Children, que recientemente informó que 3.195 niños fueron asesinados en Gaza y 33 en Cisjordania en solo tres semanas, lo que supera el número de niños asesinados anualmente en todos los conflictos a nivel mundial desde 2019. «Esto no puede ser un daño colateral», ha denunciado.
«La humanidad se hunde en su hora más oscura»
Lazzarini ha señalado que actualmente más de 670.000 palestinos desplazados se ven obligados a vivir en condiciones espantosas e insalubres, con alimentos y agua limitados en escuelas y edificios superpoblados de la UNRWA, y ha agregado que este organismo de la ONU «es el último salvavidas que queda para el pueblo palestino en Gaza», donde también perdieron la vida 64 de sus trabajadores por los ataques israelíes, «el mayor número de trabajadores humanitarios de la ONU muertos en un conflicto en tan poco tiempo».
A pesar de ello, los trabajadores de la UNRWA continúan trabajando en la Franja de Gaza, representando «un rayo de luz mientras la humanidad se hunde en su hora más oscura», ha sostenido Lazzarini. Al mismo tiempo, ha advertido de que pronto no podrán actuar, ya que se están quedando sin combustible, agua, alimentos y medicinas.
En este sentido, el jefe de este organismo de la ONU ha instado a Israel a respetar el derecho internacional, subrayando que «no es una opción, es una obligación». Lazzarini ha instado a «un alto el fuego humanitario inmediato» para garantizar un flujo continuo y sin obstáculos de ayuda humanitaria, incluido combustible, hacia la Franja de Gaza.