Se trata de una modernización de un cohete que ya ha quedado obsoleto y será parte integrante de la la tríada nuclear de Estados Unidos.
El Departamento de Defensa de EE.UU. ha firmado un contrato valorado en 996,2 millones de dólares con la empresa Lockheed Martin para la fabricación del vehículo de reentrada MK21A para los misiles tipo Sentinel, informa un comunicado del organismo.
La producción se llevará a cabo en la localidad de King of Prussia, en el estado de Pensilvania, y deberá haberse completado en octubre del 2039. Además, el Pentágono proporcionó 26,6 millones de dólares al Centro de Armas Nucleares de la Fuerza Aérea estadounidense para realizar la investigación, el desarrollo, el ensayo y la evaluación del aparato en el año siguiente.
El cohete balístico intercontinental Sentinel es una modernización para la tríada nuclear de Estados Unidos, una estructura militar tripartita que se compone de misiles nucleares lanzados desde tierra, submarinos armados con misiles nucleares y aviones estratégicos con bombas y misiles nucleares.
El Sentinel sustituirá a los 400 cohetes Minuteman III, que llevan en servicio más de 50 años. Además, este sistema de armas es la opción más rentable para la defensa del país y ampliaría sus capacidades hasta 2075.
El pasado viernes el Departamento de Defensa anunció que iniciaría la preparación de una nueva versión de la bomba de gravedad B61-13, un arma varias veces más potente que la que lanzaron sobre Japón al finalizar la Segunda Guerra Mundial.