Para que se materialice el encuentro entre ambos mandatarios se requiere que se cumplan varias condiciones previas, señaló Wang Yi.
China y EE.UU. esperan estabilizar y mejorar las relaciones bilaterales lo antes posible, y algunos de estos cambios deberían producirse antes de la posible cumbre en noviembre entre los presidentes Xi Jinping y Joe Biden, señaló el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, durante un acto con estrategas políticos en el Aspen Strategy Group, en Washington, el 28 de octubre.
El camino hacia esa posible cumbre, que se celebraría en San Francisco, no es sencillo y no se puede dejar «en autopiloto», recoge la agencia Xinhua las palabras del canciller. Para que la reunión sea factible, apuntó, las dos partes deben aún volver seriamente a lo pactado por ambos mandatarios en su cumbre en Bali en noviembre del año pasado, donde acordaron poner fin a las interferencias, superar los obstáculos, mejorar el consenso y acumular resultados.
Durante su visita a EE.UU., iniciada el pasado jueves, Wang se reunió con el presidente Joe Biden y otros altos funcionarios, con quienes, destacó, mantuvo una comunicación «profunda, constructiva y sustantiva», que se caracterizó por una actitud de «igualdad y respeto mutuo», lo que envía una señal positiva sobre una mejora en las relaciones entre ambos países, reconoció el canciller chino.
Wang invitó a la comunidad de estrategas políticos a visitar China más a menudo y contribuir a que la sociedad estadounidense elabore unos puntos de vista objetivos sobre el país asiático que aporten «más sabiduría» y promuevan un desarrollo sano, estable y sostenible de la relación bilateral.