El disparo forma parte de un programa de entrenamiento de las fuerzas estratégicas de disuasión.
Las Fuerzas Armadas de Rusia han realizado un lanzamiento de prueba de un misil balístico intercontinental Yars como parte de ejercicios de las fuerzas estratégicas de disuasión nuclear.
El misil se disparó desde el cosmódromo Plisetsk, en la provincia de Arcángel, en el noroeste de Rusia, antes de recorrer miles de kilómetros hasta el polígono Kurá, en la península de Kamchatka, en el Lejano Oriente.
El RS-24 Yars tiene un alcance operativo estimado de 11.000 kilómetros y puede ser disparado desde un lanzador móvil o desde un silo.
Los ejercicios supervisados por el comandante en jefe supremo y presidente ruso, Vladímir Putin, incluyeron los componentes terrestre, marítimo y aéreo de las fuerzas de disuasión, informa la web del Kremlin.
Además del lanzamiento del Yars, se realizó el despegue de un misil balístico Sinevá desde el submarino estratégico Tulá, ubicado en el mar de Barents. Asimismo, aviones estratégicos Tu-95MS realizaron disparos con misiles de crucero.
Los lanzamientos se llevaron a cabo con el control del Centro Nacional de Gestión de la Defensa.