«Lo que ocurrió fue que la parte canadiense ha mandado aviones militares al otro lado del mundo para crear problemas y provocaciones a las puertas de China», señaló la portavoz de la Cancillería, Mao Ning.
Pekín considera que el avión militar canadiense interceptado el lunes cerca de territorio chino violó gravemente su soberanía y amenazó su seguridad nacional, afirmó este martes la vocera del Ministerio de Exteriores del gigante asiático, Mao Ning.
«En respuesta al acto provocativo de la parte canadiense, la parte china ha presentado diligencias, y los militares chinos han tomado las medidas necesarias en el lugar. Lo que ocurrió fue que la parte canadiense envió aviones militares al otro lado del mundo para crear problemas y provocaciones a las puertas de China. La parte china reaccionó a la situación de conformidad con las leyes y regulaciones», señaló Mao, que añadió que Ottawa «tiene que respetar los hechos y dejar de difundir desinformación».
Además, destacó que aviones militares canadienses a menudo han llevado a cabo acciones de reconocimiento de proximidad y han provocado a Pekín con el pretexto de implementar resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
«Lo que hay que subrayar es que las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU nunca han autorizado a ningún país a desplegar fuerzas y a realizar operaciones de vigilancia en el espacio aéreo o aguas bajo la jurisdicción de otros países», aseveró la portavoz.
«China se opone firmemente a que cualquier país ponga en peligro nuestra soberanía y seguridad nacional con el pretexto de implementar resoluciones. China insta a Canadá a ver la gravedad del incidente y a abstenerse de dar cualquier paso aventurero o provocativo», concluyó Mao.
Este lunes, el ministro de Defensa de Canadá, Bill Blair, calificó de «peligrosa e imprudente» la interceptación del avión canadiense. «Ese tipo de comportamientos no son aceptables nunca y así se lo expresaremos a la República Popular China de la forma más adecuada», manifestó.