Corea de Norte asegura que las acciones del país norteamericano son una «flagrante provocación militar, que lleva la situación a un nivel catastrófico irreversible».
Corea del Norte denunció este viernes el arribo de un portaviones estadounidense a Corea del Sur, calificando la acción como una provocación que podría alcanzar «niveles catastróficos irreversibles», informa la agencia oficial de noticias norcoreana KCNA.
El portaviones de propulsión nuclear Ronald Reagan y su grupo de ataque llegaron el jueves al puerto surcoreano de Busan para una para una estancia de cinco días, tras participar en ejercicios conjuntos en aguas cercanas, en una demostración de fuerza.
La llegada del buque estadounidense a la región demuestra que el plan de Washington para un ataque contra Pionyang había alcanzado «la fase más seria», asegura el medio norcoreano, añadiendo que esto significaba que «el estallido de una guerra nuclear se está convirtiendo en una realidad».
Según la agencia, el constante envío por parte de EE.UU. de diversos activos nucleares a la península de Corea «es un acto flagrante de provocación militar que lleva la situación a un nivel catastrófico irreversible».
Las fuerzas estadounidenses y surcoreanas este año han intensificado sus ejercicios militares conjuntos, en los que participan portaviones, submarinos y bombarderos avanzados estadounidenses, en un supuesto esfuerzo de preparación ante las crecientes «amenazas nucleares» y de misiles por parte de Corea del Norte.
Desde Corea del Norte consideran que estos ejercicios amenazan la soberanía, integridad e intereses del país, por lo que, en caso de un ataque nuclear inminente, Pionyang tomaría las «medidas necesarias», tal como está consagrado en su doctrina nuclear, para «disuadir y repeler completamente los movimientos frenéticos» de Washington y sus aliados que buscan «iniciar una guerra atómica».
«Nuestro primer golpe más poderoso y rápido se dará no solo a los medios de ‘disuasión extendida’, utilizados por Estados Unidos como alucinógeno para sus seguidores, sino también a las bases del mal en la península de Corea y sus alrededores«, señala el medio.