El canciller polaco señaló que la decisión de Kiev de exponer la disputa de cereales ante la OMC y la Asamblea General de la ONU «hizo que se tambaleara la confianza de nuestra sociedad en la actual política del Gobierno ucraniano hacia Polonia».
El ministro polaco de Relaciones Exteriores, Zbigniew Rau, afirmó este lunes que hará falta «un esfuerzo titánico» para que las relaciones entre Varsovia y Kiev vuelvan a la normalidad tras el conflicto que ambos países mantienen con motivo de los productos agrícolas ucranianos.
Al ser preguntado por el medio Polsat sobre su ausencia en la reunión ministerial de la UE en Kiev, Rau señaló que, «en primer lugar, esto se debe al hecho de que en la política, incluida la política bilateral entre diferentes países, existen períodos de auges y recesiones».
Actualmente, en lo que respecta a las relaciones entre Polonia y Ucrania, estamos entrando en un período de recesión», indicó el ministro polaco. «Mi ausencia allí es en parte una expresión de ello», agregó.
Raus explicó que los vínculos entre Varsovia y Kiev se basan en «tres dimensiones». «La primera es la dimensión estratégica y geopolítica«, que se centra en «intereses comunes» entre Estados. Polonia está alineada con Ucrania en sus esfuerzos para contraponerse a Rusia, destacó.
«La segunda dimensión son los intereses nacionales actuales. Aquí tenemos intereses divergentes y malentendidos sobre el tránsito de cereales ucranianos a través de Polonia», continuó Rau. «Y la tercera: la política exterior puede llevarse a cabo de manera duradera y estable cuando cuenta con el apoyo de la sociedad. En un sistema democrático, esto es absolutamente esencial», expresó el ministro.
En este contexto, manifestó que la decisión de Kiev de exponer su disputa de cereales con Polonia ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Asamblea General de la ONU «hizo que se tambaleara la confianza de nuestra sociedad en la actual política del Gobierno ucraniano hacia Polonia».
Al exponer la situación, Rau destacó que «volver al punto de partida» en las relaciones entre ambas naciones «requerirá esfuerzos titánicos». No aconsejaré a las autoridades ucranianas qué hacer. Nuestra relación es larga y completa. La parte ucraniana seguramente encontrará una solución si existe esa voluntad de su parte«, concluyó.
- Las tensiones entre Varsovia y Kiev han vuelto a escalar después de que el 15 de septiembre Polonia, Eslovaquia y Hungría decidieran mantener la prohibición de las importaciones de productos agrícolas procedentes de Ucrania, a pesar de la decisión de la Comisión Europea de no prorrogar el embargo sobre el suministro de cereales ucranianos.
- En respuesta, Kiev presentó ante la Organización Mundial del Comercio demandas contra los tres países, afirmando que «es importante demostrar que estas acciones son legalmente incorrectas».
- Por su parte, el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, afirmó durante su discurso ante la Asamblea General de la ONU que algunos países de Europa «socavan la solidaridad», haciendo del suministro de grano ucraniano «una película de suspense».